España
Tras el atentado de Estocolmo

Las principales ciudades españolas prohíben el acceso a camiones durante Semana Santa

Las principales ciudades españolas y aquellas en las que la Semana Santa tiene mayor arraigo reforzarán o acondicionarán las medidas de seguridad para evitar la comisión de ataques terroristas durante las grandes concentraciones de personas que se esperan durante los próximos días.

Como ocurriera la pasada Navidad tras el atentado de Berlín, las Fuerzas de Seguridad y los Ayuntamientos extremarán el celo durante la Semana Santa, en especial durante las procesiones, entre ellas el control de acceso a vehículos de gran tonelaje en áreas concurridas.

Máxime después del atropello hoy por un camión a varios viandantes en el centro de Estocolmo, de los que al menos tres han muerto, en lo que las autoridades suecas consideran un ataque terrorista.

España se encuentra en nivel 4 de alerta antiterrorista -en una escala de 1 a 5- desde el 26 de junio de 2015, con motivo de los sucesivos atentados en Francia, Túnez, Kuwait y Somalia. En la práctica, conlleva mayor presencia policial en la calle y un reforzamiento de los controles en infraestructuras básicas, así como en aeropuertos, puertos o estaciones de ferrocarril y metro.

Sin elevar la alerta al nivel 5 (que se reserva para casos de atentados inminentes), la seguridad se intensifica en momentos puntuales, con refuerzos de «puntos críticos».

En ese contexto, además de las medidas habituales, el Ayuntamiento de Madrid prohibirá circular a vehículos de más de 3.500 kilos en el distrito Centro en los días de procesión, salvo autobuses de transporte de viajeros, unidades móviles de televisión o vehículos autorizados por la Policía.

En Castilla y León, donde la Semana Santa tiene categoría de Interés Turístico Internacional en varias ciudades como Zamora, León o Valladolid, los refuerzos pasarán por la instalación de barreras, maceteros, bolardos y vehículos policiales para impedir el paso de vehículos no autorizados en zonas de amplias concentraciones de peatones.

También el Ayuntamiento de Málaga prevé utilizar medidas específicas, como la instalación de un sistema de videovigilancia integrado por 17 cámaras que abarcaran las principales calles del centro histórico o la prohibición de entrada a la zona céntrica, que concentra el recorrido tradicional de Semana Santa, a aquellos camiones que superen los 7.500 kilogramos.

Para ello, situará «impedimentos» en distintos puntos para evitar el paso de vehículos.

En el caso de Sevilla, ante la masiva asistencia de visitantes con motivo de los desfiles procesionales en Sevilla, las administraciones reforzarán entre el Viernes de Dolores y el Domingo de Resurrección el dispositivo de seguridad con 3.200 efectivos de la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local, un 12 % más que el año pasado.

En Cataluña, donde no existe una gran tradición de procesiones durante Semana Santa, también se limitará el paso de vehículos pesados en algunas zonas de núcleos urbanos donde haya actos públicos de gran concurrencia.

La seguridad será parecida a la del año pasado o las últimas fiestas navideñas, cuando ya se había decretado la alerta 4, con una mayor presencia policial en zonas de gran afluencia de ciudadanos.

Otra ciudad que prohibirá el acceso de camiones de más de 3.500 kilos es Murcia, en la que los accesos a zonas concurridas para el tráfico de vehículos serán taponados con vehículos policiales para impedir el paso.

En Valencia, Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil se han reunido para coordinar el dispositivo de seguridad con motivo de la Semana Santa, y han establecido medidas especiales «como se hace ante cualquier evento que prevé aglomeraciones», según la concejala Anaïs Menguzzato, quien ha eludido publicitarlas.

En el País Vasco se adoptarán las medidas de seguridad recogidas en el nivel 4, aunque se «acondicionarán» a los actos programados durante la Semana Santa, al igual que en Cantabria.