España
Congreso de los Diputados

El PP multa con 500 euros a Cayetana por romper la disciplina de voto pero la diputada recurrirá

La dirección del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso ha multado a su ex portavoz Cayetana Álvarez de Toledo con 500 euros por «no respetar la línea política del grupo» y votar en blanco en la elección de candidatos pactados por el PP y el Gobierno para el Tribunal Constitucional. Sin embargo, Álvarez de Toledo recurrirá esta decisión.

La propia diputada ha dado cuenta de ello en las redes sociales, donde ha señalado que «ayer a las diez y media de la noche» había recibido los documentos, firmados por el secretario general del Grupo Popular, Guillermo Mariscal. En ellos, según subraya Cayetana, se le «exige una aportación extraordinaria a las finanzas del PP». La parlamentaria electa por Barcelona ha avanzado que presentará «recurso».

En el documento recibido por Álvarez de Toledo, en relación al expediente sancionador incoado por presunta infracción tipificada como falta grave en los Estatutos del Grupo Popular, se dice que la diputada votó en blanco «cuando conocía que la dirección del grupo había comunicado a todos los diputados el sentido del voto, que no era en blanco».

El escrito añade que los candidatos que contaban con el apoyo del PP comparecieron en la Comisión de Nombramientos «sin que exista constancia alguna de que Álvarez de Toledo manifestara su oposición».

De este modo, el grupo que preside Pablo Casado explica que la apertura del expediente sancionador es una consecuencia contemplada en los estatutos «y como tal ha de ser aplicado». Como instructor de este procedimiento figura Carlos Rojas, portavoz adjunto y diputado por Granada.

«Autonomía»

Hace unas semanas, la diputada remitió una carta al secretario general del Grupo Parlamentario Popular en respuesta a la comunicación del expediente abierto contra ella por vulnerar la disciplina de voto en la elección de los magistrados del Tribunal Constitucional. Según esgrimió Álvarez de Toledo, sancionarla «sería tanto como sancionar la defensa de los principios y la coherencia ideológica del Partido Popular».

«Estoy segura de que la dirección del Grupo convendrá conmigo», manifestó, en que «no procede por su parte ninguna actuación». «Daré su amable carta por no recibida», ironizó en alusión a la misiva en la que se le comunicaba que disponía de diez días para presentar alegaciones.

Para Álvarez de Toledo, la apertura del expediente «vulnera los procedimientos legales, incumple los Estatutos del Grupo, socava la autonomía del diputado, frustra la regeneración democrática e impugna el ideario del Partido Popular».

«Cuando sólo queda la disciplina, la deliberación se evapora. Cuando la autonomía, iniciativa y personalidad del parlamentario se castigan, la dependencia, la sumisión y la mediocridad proliferan», lamentó.