España
Crisis del coronavirus

Otra mentira de Sánchez: la inmunidad del 70% no se conseguirá hasta septiembre por falta de vacunas

Llegó el día señalado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la meta prometida no se cumplió: España no ha alcanzado la inmunidad de grupo fijada en el 70% de la población con pauta completa. Hacen falta aún 3,5 millones de pinchazos, que al ritmo actual de la campaña de vacunación retrasará ese umbral hasta ya entrado el mes de septiembre. De hecho, los expertos señalan que ni siquiera ahí se conseguirá la ansiada inmunidad de grupo.

Sánchez no ha cumplido sus propios plazos. Fue él quien se los impuso el pasado mayo, pero llegado el momento le han hecho falta 3,5 millones de vacunas extra. Las necesarias para que 33,5 millones de españoles estén inmunizados por completo, un grupo que hasta ahora se consideraba suficiente para esa ‘inmunidad de rebaño’.

En la última semana, España ha colocado segundas dosis al ritmo de 1,2 millones. A poco más de 170.000 pautas completas cada 24 horas. Siguiendo esa proyección, las 3,5 millones de dosis que faltan hasta el objetivo prometido por Sánchez tardarán al menos 3 semanas en inyectarse. Esa previsión atrasará hasta septiembre, concretamente hasta la segunda semana del mes, el cumplimiento del objetivo prometido por Sánchez.

Nueva promesa incumplida

Sánchez suma así un nuevo fiasco a su propio calendario de vacunación. El pasado 10 de mayo, durante una declaración institucional desde Atenas, Pedro Sánchez, eufórico, aseguró que España estaba «a sólo 100 días de lograr la inmunidad de grupo». Ese plazo se cumplió precisamente este miércoles, sin alcanzar el objetivo del 70% de españoles con la pauta completa. El porcentaje que Sánchez señaló para alcanzar esa ‘inmunidad de rebaño’.

Pedro Sánchez convirtió esa ‘cuenta atrás’ en toda una estrategia de marketing que repitió con insistencia en sus comparecencias. Ahora, con la promesa incumplida, el jefe del Ejecutivo guarda silencio.

Las cosas se complican

De hecho, el del 70% ya se considera una meta ‘virtual’, ya que la irrupción de nuevas cepas -especialmente la delta- ha llevado a los expertos de todo el mundo a elevar el porcentaje necesario de inmunidad hasta el 90%. Un total de 42 millones de personas, la totalidad de la ‘población diana’ menos los menores de 12 años. Es decir, harían falta 12 millones de pautas completas extra respecto a la cifra actual. El horizonte en ese caso, y siguiendo el mismo ritmo, se alargaría hasta la primera semana de noviembre.

La llegada de la variante delta, mucho más contagiosa, ha obligado a replantearse ese objetivo al multiplicar el nivel de transmisibilidad por contagiado. «La inmunidad de rebaño del 70% se calculó en función a un número básico de reproducción o ‘R’ (las personas a las que puede contagiar un positivo) de 2 o 3, que es lo que se estimaba que tenía la Covid-19 al principio. Pero ahora se ha visto que es un 50% más transmisible. Es decir, que la ‘R’, según estudios que se han ido publicando, estaría entre 5 y 8», explica el vocal de la Sociedad Española de Epidemiología, Joan Caylà.

La inmunidad de rebaño es, básicamente, un dique de contención ante cualquier enfermedad infecciosa: a más inmunizados, menos probabilidad de transmisión lo que, en consecuencia, acorta considerablemente la cadena de contagios. De esta forma, si en un grupo de personas la inmensa mayoría cuenta con anticuerpos contra el virus SARS-CoV-2, el patógeno se encontrará con muchas más barreras (los propios inmunizados) a la hora de alcanzar a los que no están protegidos.