'Caso Begoña Gómez'

Moncloa enchufó con un contrato de «especial dedicación» a la directora que trabajó para Begoña Gómez

Presidencia puso a Cristina Álvarez al servicio de las actividades privadas de la mujer de Pedro Sánchez

Begoña Gómez.
Begoña Gómez.
Luz Sela

Cristina Álvarez, la directora de Programas de la Presidencia del Gobierno que Moncloa puso al servicio de las actividades privadas de Begoña Gómez, firmó un contrato en régimen de «especial dedicación». Una categoría que permite fijar una jornada laboral más amplia -de 40 horas semanales- y extender ese horario «por necesidades del servicio».

Álvarez, como ha venido publicando este periódico, se implicó al cien por cien en los negocios de la mujer del presidente del Gobierno. La asistente está ahora imputada y su contratación es una de las principales líneas del juez Juan Carlos Peinado.

Según la documentación en poder del magistrado, y remitida por la Presidencia del Gobierno, Álvarez fue contratada con régimen de «especial dedicación», de acuerdo con la «resolución de 28 de febrero de 2019, de la secretaría de Estado de Función Pública, por la que se dictan instrucciones sobre jornada y horarios de trabajo del personal al servicio de la Administración General del Estado y sus organismos públicos».

Esta resolución determina que «la duración de la jornada del personal que desempeñe puestos de trabajo considerados de especial dedicación será de 40 horas semanales, sin perjuicio del aumento de horario que excepcionalmente sea preciso por necesidades del servicio». Y se añade: «Cada departamento ministerial y organismo o ente público determinará en función de la naturaleza y características del servicio aquellos puestos de trabajo que deban prestarse en régimen de especial dedicación».

Presidencia del Gobierno consideró que Álvarez debía contar con un régimen de «especial dedicación» en vistas a la asistencia a Begoña Gómez en sus distintas actividades públicas y privadas. En la nota enviada por Moncloa al juez se señala además que «el desempeño habitual de sus tareas se realiza en el Palacio de La Moncloa».

Cristina Álvares cobró 300.839 euros

Álvarez ha cobrado 300.839 euros brutos desde agosto de 2018 como asesora de Begoña Gómez, según la información facilitada por Presidencia. En el escrito se indica además que desempeña «tareas de colaboración inmediata, de carácter logístico y organizativo en el marco de la atención» a Begoña Gómez. En concreto, ocupa el puesto de «directora de programas del Gabinete de la Presidencia del Gobierno con efectividad del día 16 de julio de 2018».

Moncloa precisa que estas tareas incluyen «la gestión de la agenda y la preparación de la presencia en reuniones, visitas y/o eventos, la gestión y administración de las comunicaciones, la asistencia telefónica y documental, el acompañamiento en desplazamientos y la interlocución y coordinación con los equipos de protocolo, seguridad, asuntos exteriores y resto de departamentos implicados en la organización de actos y viajes del presidente del Gobierno o derivados de su propia agenda».

Cabe recordar que Álvarez compareció por primera vez ante el juez Peinado en calidad de testigo el pasado diciembre. Este febrero, el instructor acordó cambiar su situación procesal para citarla como imputada. 

Investigación a la asesora de Begoña Gómez

El papel de esta asistente centra ahora una de las principales líneas de investigación del juez Juan Carlos Peinado. La propia Álvarez admitió en una de sus comparecencias que se encargaba de la agenda pública y privada de la mujer del presidente del Gobierno. El magistrado ha citado a declarar como testigo a Félix Bolaños, ahora ministro y que era secretario general de la Presidencia del Gobierno cuando la asesora fue contratada como directora de Programas del departamento, por un posible delito de malversación.

Como ha revelado OKDIARIO, Álvarez se involucró al cien por cien en las actividades privadas de la mujer del presidente socialista, a pesar de que su nómina dependía de Moncloa. Tanto es así que llegó a presentarse como  «colaboradora» de la cátedra que la mujer de Pedro Sánchez dirigía hasta este curso en la Universidad Complutense.

«Buenos días María Jesús y Mercedes. Fue un placer que pudiéramos conocernos en la reunión de ayer. Gracias por explicarnos los temas de patentes, de marca, la propiedad intelectual y conocer cómo nos podéis ayudar. Tal como quedamos, os hacemos llegar nuestros datos de contacto para que podáis hacer llegar qué datos necesitáis para empezar los trámites para la patente de la marca y la propiedad intelectual», escribió a las responsables de la Oficina de Transferencia de los Resultados de la Investigación (OTRI) de la Complutense.

El juez también dispone de correos electrónicos que acreditan su papel en la gestión del día a día de la cátedra. En uno de ellos, por ejemplo, Álvarez se comunica con uno de los patronos de la cátedra, Reale Seguros. Reale fue uno de los participantes en el taller de Gómez en el congreso antes mencionado.

«PD: Me dice Begoña que te traslade que le encantaría que sigáis como patronos de la cátedra, aunque sea con una cantidad inferior. Dispuestos a colaborar con vosotros en lo que necesitéis», escribió la asistente en un correo dirigido a la  directora de Comunicación Institucional y RSE de Reale, Pilar Suárez-Inclán.

Este periódico ha ido revelando además distintas imágenes en las que se ve cómo Álvarez ha ejercido de secretaria personal de Begoña Gómez desde su llegada a La Moncloa, en julio de 2018.

La asistente fichó por Presidencia del Gobierno tras ganar Pedro Sánchez la moción de censura. Apenas un mes después, el 16 de julio, ya estaba trabajando para la mujer del presidente. Fue la propia Begoña Gómez, con la que mantenía una estrecha relación desde que trabajaron juntas en la consultora Inmark, la que se puso en contacto directo con ella mediante una llamada telefónica ofreciéndole un puesto «de confianza». Gómez alegó que «le habían comentado que podía tener una persona de confianza y asesoramiento, y que le gustaría que fuera ella». Para acceder al cargo, no pasó ninguna prueba ni entrevista.

En un escrito remitido al juez, Presidencia del Gobierno reconoce implícitamente que Cristina Álvarez no podía ejercer las funciones de asistente de Begoña Gómez.

En concreto, en respuesta al requerimiento de Peinado sobre el cargo y funciones de Álvarez, la Presidencia del Gobierno contesta que «los puestos de trabajo en la Administración General del Estado no tienen normativamente funciones asociadas de forma directa» y que «las tareas que realiza Doña María Cristina Álvarez en el Gabinete de la Presidencia del Gobierno son las propias del centro directivo y la unidad a la que se adscribe el puesto de trabajo».  Entre esas funciones, ninguna hace referencia al asesoramiento a la mujer del presidente, menos aún en sus actividades privadas.

Lo último en España

Últimas noticias