España
Crisis del coronavirus

El modelo Sánchez fracasa: los países con test de coronavirus masivos tiene una décima parte de muertes

España decidió restringir los test de coronavirus. Corea del Sur o Singapur optaron por la vía contraria: realizar test masivos, justo lo que ha pedido la Organización Mundial de la Salud. Hoy España supera los 800 muertos. Y los otros dos países, con una población conjunta claramente superior a la española, suman 84 muertes en el momento de escribir este artículo.

El Ministerio de Sanidad ya ha anunciado que trabaja a contrarreloj en un proyecto para hacer test rápidos de diagnóstico del Covid-19, de forma que se puedan realizar las pruebas de detección a un porcentaje de la población más generalizado, incluidas aquellas personas que permanezcan en régimen domiciliario y que muestren ya sintomatología. Se trata de todo un reconocimiento del error en el modelo de gestión de la enfermedad elegido por el Gobierno. Un error, por cierto, provocado por la falta de previsión en las compras de material médico, que ha llevado a España a no disponer de tests de la enfermedad suficientes como para efectuar un control general.

Pero la prueba del incorrecto mecanismo de combate a la enfermedad queda a la vista con los datos estadísticos. España, en estos momentos, supera ya las 800 muertes y ronda los 18.000 casos de contagio. Todo ello con una población total de 46,6 millones de habitantes. Y todo ello, con el modelo, mantenido hasta el momento de restringir los tests del COVID-19.

El caso opuesto son Corea del Sur, Singapur o Hong Kong. En los tres territorios se han implantado los test a discreción con el fin de detectar los casos e incrementar los controles sobre los focos de contagio efectivos, de forma que la atención se pueda enfocar a esos objetivos y lograr una gestión más eficaz de los recursos disponibles. Y los datos de los tres avalan su eficacia, frente al descontrol de la gestión española.

Corea del Sur ha registrado 84 víctimas mortales (con 51,6 millones de habitantes); Singapur, 0 víctimas mortales (con 5,6 millones habitantes); y Hong Kong, 4 muertes (con 7,4 millones habitantes).

El modelo más significativo es el coreano. En ese país, todos los ciudadanos se encuentran en estos momentos geolocalizados, a través del móvil, de forma que, en cuanto se produce un caso de cruce o acercamiento de un ciudadano con un contagiado, se comunica a través de una app al móvil del nuevo posible contagiado su obligación de someterse al test y de mantenerse bajo control y aislamiento hasta comprobar si efectivamente es ya un positivo en coronavirus.

De ese modo, se ha podido aislar los focos y gestionarlos minimizando los contagios y las víctimas mortales.