España
Ministerio del Interior

Marlaska justifica ahora que la Policía use pelotas de goma en su defensa cuando las negó en Cataluña

El Ministerio del Interior destaca que su uso "no tiene carácter ofensivo"

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, defiende ahora que la Policía use las pelotas de goma como medio de defensa propia. Una explicación que contrasta con las instrucciones que los agentes recibieron en plena ofensiva en Cataluña, durante los disturbios por la sentencia del ‘procés’. 

«La frase habitual es ‘aguantad, aguantad’ antes de conseguir el necesario permiso. De hecho, en muchos de los enfrentamientos no se nos está dando ese permiso para usarlas, con lo que nos enfrentamos sólo con las porras», señaló una fuente de la Policía Nacional a OKDIARIO en aquellos días.

Ello, pese al indudable riesgo para la seguridad de los agentes, que sufrieron la lluvia de adoquines, piedras y demás objetos por parte del separatismo radical. Sin embargo, el uso de pelotas de goma fue muy limitado.

En una respuesta parlamentaria, revelada por el diputado de Bildu, Jon Iñárritu, Interior destaca que el empleo de las pelotas de goma «constituirá el último recurso disponible cuando otras herramientas, instrumentos o procedimientos hayan resultado en vano o sean insuficientes para restablecer el orden público».

Sin embargo, el departamento de Grande-Marlaska indica también que su uso no tiene «un posible carácter ofensivo», sino «más bien lo contrario, tratando de salvaguardar la integridad física de terceras personas o incluso de los propios agentes ante los lanzamientos indiscriminados de armas arrojadizas u otros objetos contundentes».

Es decir, justifica así que los agentes lo utilicen cuando vean comprometida su propia seguridad, en determinadas ocasiones, que encajarían con las protestas violentas de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR), que se vivieron en las calles de Barcelona en los días posteriores a la sentencia del Tribunal Supremo. Las protestas derivaron durante varias jornadas en una auténtica batalla campal. 

El Ministerio destaca en su respuesta que «las unidades especializadas en control de masas cuentan con el necesario armamento y equipamiento no letal para su intervención en conflictos de índole de orden público, con la misión específica de prevenir, mantener y, en su caso, restablecer el mismo».

«El elenco de instrumentos, técnicas y herramientas a su alcance, empleados siempre en el marco de la intervención gradual, cobran sentido en conjunto, constituyendo el equilibrio necesario que permite emplearlos de manera progresiva en función de las necesidades y de la situación, garantizando la disponibilidad de medios que permitan un amplio espectro de opciones tácticas diferenciadas», explica Interior. Insiste, eso sí, en que su «empleo es siempre selectivo».

Iñárritu preguntaba al Gobierno por el «tipo de formación» que se imparte a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado sobre el uso de pelotas de goma «y armas menos letales, especialmente en el contexto de concentraciones y manifestaciones». También requería «qué tipo de normativa se aplica», el protocolo para el uso de este tipo de material antidisturbio y el «tipo, marca y fabricante» que suministra las pelotas de goma.

También preguntó por «cuántos proyectiles antidisturbios se han utilizado por provincias en los últimos diez años» y «cuántas personas han resultado heridas o fallecidas por el impacto de estos proyectiles». Interior responde que las pelotas utilizadas «son del tipo de caucho, no existiendo marca regitrada sobre dicho elemento».

«Por último, cabe señalar que no se tiene conocimiento de ningún fallecido como consecuencia del uso de pelotas de goma», concluye en su respuesta.

Agricultores

Recientemente, el Ministerio del Interior volvió a ser objeto de críticas por sus instrucciones para hacer frente a las protestas, en este caso, de los agricultores, en las que -según denunciaron varios manifestantes- se emplearon pelotas de goma. Ocurrió en la protesta frente al Instituto Ferial de Extremadura (FEVAL) de Don Benito (Badajoz), donde se encontraban el ministro de Agricultura, Luis Planas y el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara.

El presidente del PP en Extremadura, José Antonio Monago, reclamó el cese inmediato de la delegada del Gobierno en la región, Yolanda García Seco, por haber ordenado cargas policiales contra los agricultores, que reivindicaban  una solución a los bajos precios de los productos agrarios frente a los altos costes de producción.