España

Marlaska cree que no se puede mantener la dispersión de etarras «en el momento actual»

En su intervención en un foro que organizado por la cadena SER en Las Palmas de Gran Canaria, el ministro Grande-Marlaska ha recordado que la dispersión se enmarcó en la política antiterrorista y estaba dirigida a poder «minimizar la fortaleza de la organización terrorista», con el objetivo de que no controlara a los presos dentro de las cárceles.

En este sentido, ha negado que fuera «una política penitenciaria», sino «una política antiterrorista». Por ello, ha afirmado que, una vez que ETA ha sido «disuelta y derrotada por el Estado de Derecho, por la sociedad democrática, no por ellos», que «solo han hecho el acto formal» de disolución, es momento de hacer «política penitenciaria».

El ministro del Interior cree que, por ello, ahora «una de las cuestiones a valorar es, en primer lugar, que los internos estén en los centros penitenciarios donde las juntas de tratamiento crean que es oportuno, atendiendo a sus circunstancias personales, el delito cometido, y a las posibilidades de tratamiento en unos y otros centros».

«Y una de las evaluaciones sociales que se tienen en cuenta es su entorno familiar porque, y hablo en general, muchas veces lo que se olvida de las privaciones de libertad es el efecto ‘prisionización’, que es un efecto negativo para cuando se tenga que salir a la sociedad», ha indicado.

A su juicio, si una persona está «apartada mucho tiempo, alejada de su entorno», le va a ser más difícil su adaptación a la sociedad cuando sea excarcelada.

Traslados

Tras recordar que esta materia la gestiona Instituciones Penitenciarias, ha manifestado que «la única indicación que se hace es que no puede mantenerse una política de lucha contra el terrorismo en el momento actual». No obstante, ha apuntado que eso tampoco quiere decir que se proceda a «traslados indiscriminados», ha añadido.

Fernando Grande-Marlaska ha insistido en que deben ser las juntas de tratamiento las que evalúan las circunstancias «y, en su caso, deciden o no si es oportuno un traslado» a un centro penitenciario cercano a su lugar de residencia.

En este sentido, ha asegurado que al País Vasco solo han sido trasladados dos presos de ETA de la ‘vía Nanclares’, es decir, «aquellos que se habían apartado hace tiempo de la organización terrorista, habían pedido perdón a las víctimas, y habían procedido a la reparación del daño, etc».

«Nosotros hacemos política penitenciaria, siempre informando y con conocimiento de las asociaciones de víctimas», ha destacado, para señalar que, «por lo que ha representado el terrorismo de ETA», para el Gobierno es «muy satisfactorio» que estos colectivos «mayoritariamente respalden su política en esta materia».

En esta línea, no ha descartado que haya más acercamientos de reclusos de la banda, pero «siempre que la legalidad penitenciaria se vaya cumpliendo y en los términos que la Ley establece». Además, ha precisado que se hará «con luz y taquígrafos».