España

Las opciones de Carles Puigdemont para ser investido

A solo unos días del debate de investidura, el próximo martes 30 de enero a partir de las 15:00 horas, los planes del ex presidente fugado, Carles Puigdemont, siguen siendo una incógnita.

Las opciones que tiene Puigdemont para ser investido son básicamente dos: o bien regresa a España y, evitando la detención, entra en el Parlament y consigue una investidura presencial; o bien el Parlament pone en marcha una investidura que no exija su presencia. Dentro de cada una de las opciones pueden darse varios escenarios que determinarán el destino del Govern.

Investidura presencial

Carles Puigdemont. (Foto: AFP)

Para ello, Carlos Puigdemont necesita atravesar la frontera y acceder al Parlament sin ser previamente descubierto. El Gobierno ha dejado claro, en varias ocasiones, que si el ex presidente vuelve a España será detenido. El propio Rajoy aseguró que «si viene, será detenido».

Aunque regresara a España y se ejecutara la orden de detención que pesa contra él, también se podría dar el caso de que el juez le permitiera acudir al pleno de investidura.

JxCat ha explorado la posibilidad de que esa detención no sea posible debido a la inmunidad parlamentaria. Sin embargo, el fiscal general del Estado, Julián Sánchez, ha asegurado asegurando que esa inmunidad parlamentaria no es argumento suficiente para impedirlo.

La siguiente pregunta sobre este escenario es cómo accedería Puigdemont a España. Mar, aire o tierra. Infinitas posibilidades que han provocado que el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, haya desplegado un dispositivo en el que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado vigilan las fronteras. Unas medidas que han llevado incluso a registrar los maleteros de los coches por la posibilidad de que el ex presidente intente entrar en España de tal forma.

Investidura a distancia

El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, interviene por videoconferencia desde Bruselas. (Foto: EFE)

En este caso, Puigdemont habría decido permanecer en Bruselas e intentar ser investido presidente en la distancia. También existen varias opciones para esta fórmula: delegar o defender la candidatura mediante videoconferencia.

En el primer caso, el candidato prófugo designaría a un cargo de confianza para que le representase a la hora de presentar el programa y debatirlo con los distintos grupos de la cámara. De esta manera, la participación de Puigdemont sería nula.

La segunda alternativa es la videoconferencia. Un método usado en varias ocasiones por Puigdemont, por ejemplo, en el inicio de su campaña para las elecciones catalanas del 21-D.

Ninguna de estas dos opciones tendrán la autorización del Gobierno de España, que impugnará ante el Tribunal Constitucional cualquier investidura que tenga como candidato a un prófugo de la Justicia y no se realice mediante su presencia física en el Parlamento de Cataluña, como exige el reglamento de la Cámara autonómica.