Un informe de Sanidad alertaba en plena crisis del gran riesgo de los aeropuertos que ahora son un ‘coladero’
En plena oleada de rebrotes, el Gobierno de Pedro Sánchez sigue rechazando reforzar los controles, que se limitan a un formulario, una medición de temperatura y un "control visual"
El ‘Procedimiento de actuación de Sanidad Exterior ante el brote de enfermedad por el nuevo coronavirus’, un documento del Ministerio de Sanidad fechado el 5 de marzo, alertaba con claridad del riesgo que suponían los aeropuertos para la entrada del virus en España. Pese a ello, en plena oleada de rebrotes, el Gobierno de Pedro Sánchez sigue rechazando reforzar los controles, que se limitan a un formulario, una medición de temperatura y un «control visual».
La guía avisaba ya entonces -cuando la pandemia se extendía de forma dramática aunque aún sin ser percibida por las alertas del Ministerio de Salvador Illa- que los aeropuertos eran un punto crítico para la entrada de contagiados.
«En España, el principal riesgo de aparición de casos de enfermedad por nuevo coronavirus (Covid-19) está asociado a la importación del virus por viajeros internacionales infectados», se recoge en concreto en el protocolo.
Por entonces, tres días antes del 8-M, el Gobierno de Pedro Sánchez seguía negando públicamente los riesgos. Pero el protocolo de Sanidad Exterior ya alertaba del impacto del virus.
Así, se avisaba que «en los seres humanos los coronavirus habitualmente se relacionan con infecciones del tracto respiratorio superior, pero pueden causar cuadros graves, como ocurre con el coronavirus que causó el síndrome respiratorio agudo grave y el coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV)». Pese a ello, el Ejecutivo socialcomunista alentó las marchas ideológicas que tendrían lugar apenas tres días después.
El protocolo seguía insistiendo en que «cualquier persona es susceptible a la infección». Y también destacaba que su transmisión se producía a través de «gotas respiratorias de más de 5 micras y por contacto directo con las secreciones de personas infectadas». También recogía el riesgo de estar a una «distancia menor de 2 metros» de una persona infectada.
Situación preocupante
La situación es preocupante en zonas de alto tránsito, como Madrid. El Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso lleva meses alertando de los riesgos y exigiendo más medidas. La Comunidad ha detectado ya 116 casos importados, según reveló esta semana el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, quien insistió al Ministerio en aplicar pruebas de origen a viajeros que se trasladan al aeropuerto de Barajas.
Escudero avisó que los contagios «no paran de crecer» y, según fuentes de la Consejería, del total de 116 casos importados de Covid-19, sólo cuatro han sido comunicados por Sanidad Exterior mediante los controles que despliega en Barajas.
Madrid ha reiterado la necesidad de tomar «algún tipo de decisión en origen y siempre con criterio de reciprocidad», algo que aprecian positivo desde el punto de vista sanitario ante la pandemia actual.
Además, reclaman un certificado PCR a la hora de poder embarcar asegurando que muchos países están exigiendo este tipo de pruebas en origen.