Sánchez recibido en Murcia con gritos de «¡Dimisión!», «¡Dimisión!», «¡Dimisión!»
Los manifestantes también le han gritado "¡cobarde!" por no salir de la estación
Sánchez desprecia al Rey y camina por delante de él en la inauguración del AVE a Murcia
Sánchez hace esperar al Rey un minuto para intentar evitar los abucheos en el desfile
Gritos de «¡fuera!» y «¡dimisión!»: así ha sido la gran pitada a Sánchez en la Fiesta Nacional
Ha vuelto a ocurrir. Esta vez en Murcia. Ha sido este lunes por la tarde, durante la inauguración del tren de alta velocidad que desde hoy conecta Madrid con la capital del Segura. Decenas de manifestantes, más de un centenar, han recibido al presidente del Gobierno Pedro Sánchez con gritos y abucheos en los que le pedían su dimisión.
Los protestantes se han concentrado frente a la estación de Murcia-El Carmen minutos antes de la llegada del tren inaugural a la capital murciana. Pese a que en ningún momento estaba prevista la salida del presidente al exterior, pero con el fin de alejar lo máximo posible los cánticos y que no molestasen al acto institucional, la Policía ha establecido un cordón de seguridad importante.
Tras una larga espera, durante la hora que ha durado el acto inaugural -con los discursos de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez Jiménez, los presidentes de la Comunidad Valenciana y Murcia, Ximo Puig y Fernando López Miras, y el propio Sánchez-, los concentrados han añadido a sus proclamas también el grito de «¡cobarde!» por el hecho de que el presidente no haya salido de la estación.
Habituales
Las manifestaciones contra Pedro Sánchez se han convertido en una constante habitual allá donde va. Unas convocatorias que han ido en aumento en los últimos meses, coincidiendo también con algunas de las decisiones más polémicas que ha tomado su gabinete -en especial en lo referente a los acuerdos con los separatistas-.
Estos actos pacíficos, aunque llenos de críticas, han provocado que Moncloa haya sugerido al presidente limitar su presencia en el territorio. De hecho Sánchez ha reducido sus contactos con los ciudadanos a la mínima expresión en el marco de la campaña con la que, cada fin de semana, pretendía recorrer toda España.
Este tipo de actos de partido, que empezaron en septiembre, se han limitado a mitines en lugares cerrados para evitar gritos y abucheos. Además, con el fin de controlar las imágenes que se difunden, en algunos casos el jefe del Gobierno se ha personado por sorpresa minutos antes a la localidad que visitaba para hacer una visita a algún comercio o al mercado, con sus propias cámaras, y eludir así las posibles incidencias al no conocer su programa ese día.
Una de las protestas más sonoras contra Sánchez, en las últimas semanas, fue la que se produjo en el Paseo de la Castellana de Madrid durante la celebración del 12 de octubre. Una manifestación que intentó mitigar llegando tarde al acto, pegado al Rey Felipe Vl. Aún así fue abucheado.
Temas:
- AVE
- Murcia
- Pedro Sánchez