España
Crisis del coronavirus

El Gobierno reconoce que sólo cuenta como muertos por coronavirus a los diagnosticados en vida

En los últimos días se han multiplicado las sospechas sobre las cifras oficiales de fallecidos por coronavirus. El foco de la duda está en las defunciones que se producen en residencias de ancianos, que algunas comunidades -como ocurre en Cataluña- no están contabilizando como tal al no someter al test a los pacientes. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha confirmado que tan sólo se cuenta como fallecidos por Covid-19 a aquellos que tenían diagnosticada la enfermedad.

El cómputo de fallecidos por coronavirus se realiza «conforme a los protocolos aprobados», ha defendido Salvador Illa en la rueda de prensa conjunta que ofreció este miércoles junto al ministro de Consumo, Alberto Garzón.

«Toda persona que ha sido diagnosticada como positivo por coronavirus y fallece, es contabilizada como una persona fallecida por causa del coronavirus. Es el criterio que tiene que seguir todo el mundo independientemente del lugar donde se produzca el fallecimiento», admitió el ministro al ser preguntado por las singulares reglas de conteo de defunciones que aplican algunas comunidades.

Esta situación se está dando especialmente en Cataluña, que por sistema está dejando fuera de las estadísticas las muertes de ancianos en residencias, a quienes por norma general no se les está realizando la prueba del coronavirus por el desabastecimiento endémico de test que hay en toda España. Pero la práctica, según denuncian las propias residencias, se está llevando a cabo por toda España.

Las palabras de Illa vienen a reconocer lo que ya adelantó OKDIARIO: sólo se contabilizan como muertes por coronavirus a aquellos que fueron diagnosticados en vida, al resto se les apunta como «Covid-19 no confirmado». Y ante la prohibición de realizar autopsias clínicas, resulta imposible determinar oficialmente si el virus ha sido la causa de la muerte.

‘Adelgazar’ las cifras

El pasado 28 de marzo, el Consejo General de los Colegios Oficiales de Médicos de España trasladaba nuevas instrucciones a los doctores sobre las «directrices del Ministerio de Sanidad y del Ministerio de Justicia» en lo referente a la certificación de las muertes por coronavirus. Dejaban claro que, a partir de ese momento, las instrucciones del Gobierno de Pedro Sánchez eran registrar como «Covid-19 no confirmado» todos aquellos casos que no cuenten con «confirmación analítica».

El problema es que las autopsias se han eliminado para estos casos por orden oficial; los test escasean y el colapso sanitario provocado por la escalada de casos limita la capacidad analítica. Traducido: infinidad de fallecidos por coronavirus pasarán a la categoría estadística de «no confirmado», algo que adelgazará los datos oficiales que ofrece el Gobierno de Pedro Sánchez como balance de su gestión del coronavirus.

Así, los certificados de defunción deberán establecer como causas las siguientes:

Causa inicial o fundamental de la muerte: Covid-19 no confirmado o sospecha de infección por coronavirus».

Causa inmediata: la causa última que se considere correcta, sirva como ejemplos fallo multiorgánico, distrés respiratorio o insuficiencia respiratoria aguda. Podrán reflejarse causas intermedias si las hubiera o se conocieran: neumonía, sepsis o coagulopatía».