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Lastra, Díaz y otras feministas del PSOE piden echar del partido a los puteros

Adriana Lastra y Susana Díaz son unas de las firmantes del documento

El PSOE ha tenido varios casos en los que altos cargos han estado vinculados a la prostitución

PSOE feministas
Adriana Lastra durante un acto del PSOE. (Foto: EP)
Rafael Molina

Feministas del PSOE han puesto en marcha una campaña para poder expulsar del partido a los cargos públicos que «soliciten, acepten u obtengan un acto sexual de una persona a cambio de una remuneración o beneficio del tipo que sea», es decir, a las personas que consuman la prostitución. Además, han pedido adaptar el código ético para que «incorpore el rechazo explícito al ultrajante negocio de la prostitución».

En el Código Ético y de Conducta del PSOE, ahora mismo se incluye que los militantes, pero especialmente los cargos públicos, están «obligados a desempeñar sus funciones con austeridad, integridad, imparcialidad, honradez, ejemplaridad, eficacia y plena dedicación al servicio público y del partido, en su caso».

Feministas del PSOE han hecho referencia explícita al artículo 5.3 de este código, fijándose concretamente en el término «actuación responsable» respecto a los cargos públicos del partido. Las firmantes de este texto trasladan su deseo de que esa exigencia se extienda no solo a la «plena dedicación al servicio público», sino también a los «comportamientos que incumplirían el espíritu y los valores que representan al PSOE».

Las mujeres que forman parte del texto expresan su petición de incluir en el Código Ético «el rechazo explícito al ultrajante negocio de la prostitución» como «condición inexcusable para el cumplimiento del principio de ejemplaridad de los cargos públicos». De ese modo, si se produce un incumplimiento, sería «motivo de expulsión» para «todo aquel que solicite, acepte u obtenga un acto sexual de una persona a cambio de una remuneración o beneficio del tipo que sea».

Con esta medida, este grupo de mujeres pretende ser «coherente con la posición abolicionista del PSOE». Hasta ahora, la petición cuenta con el apoyo de la que fuera vicesecretaria general del PSOE y actual diputada en el Congreso de los Diputados, Adriana Lasta, así como la ex presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, como ha adelantado The Objective.

A su vez, han expresado su voluntad de hablar con la ministra de Igualdad, Ana Redondo, «en su calidad de secretaria Federal de Igualdad» para que «apoye esta iniciativa».

Las feministas defienden que la «modificación es coherente con la posición política del PSOE que busca crear un nuevo marco normativo y favorecer el cambio cultural que debe comenzar dentro de casa». Unas modificaciones que se harían efectivas a partir de los próximos Congresos, tanto regionales como federales, del PSOE.

Más allá de ello, consideran que se «enmarca en las recomendaciones de los organismos internacionales que reclaman medidas efectivas para reducir la demanda de prostitución y, por tanto, del tráfico de seres humanos, la explotación sexual y el pestilente negocio de los grupos criminales organizados», reza la nota de prensa del grupo. «El abolicionismo es el camino que España debe seguir», ha sentenciado el texto.

«Afición descontrolada»

Uno de los casos más destacados en los que altos cargos del PSOE se han visto involucrados salpicó al que fuera director de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (FAFFE) durante los gobiernos socialistas en la región, Fernando Villén. Fue condenado a seis años de cárcel por pagar en prostíbulos con dinero público e intentar manipular la contabilidad para que pareciera que había devuelto el dinero.

La jueza Mercedes Alaya, describió en la sentencia los actos de Villén como una «afición descontrolada»  y constató que había pagado 40 veces con dinero de las arcas públicas en locales de alterne. En total, se gastó más de 30.000 euros en «fiestas, orgías y festivales», como recoge la sentencia.

El caso del Tito Berni también estuvo salpicado por el consumo de prostitución por parte de los investigados. Juan Bernardo Fuentes, ex diputado del PSOE, tuvo que dimitir después de presuntamente haber cobrado mordidas tanto en dinero como en especie por arreglar subvenciones para empresarios canarios. Las evidencias con las que contaba el juez mostraban los chats de WhatsApp y fotos de los implicados en las que se organizaban juergas en prostíbulos con alcohol y cocaína.

Otro de los casos es la trama Koldo, en la que se investiga a varios empresarios y a Koldo García, ayudante del ex ministro de Fomento, José Luis Ábalos, por presuntas mordidas en la adquisición de mascarillas en los peores meses de la pandemia.

Uno de los investigados en el caso es el que hasta esta semana era el secretario general de Puertos del Estado Álvaro Sánchez Manzanares. El que fuera alto cargo del Ministerio de Transportes que hoy encabeza Óscar Puente, recibió una llamada de Koldo y le dijo «Koldo eres un degenerado macho, siempre me pillas cuando estoy con tías», como consta en el auto.

Sánchez Manzanares fue el responsable de comprar mascarillas para Puertos del Estado a la empresa investigada en la trama. Por esta razón fue cesado del cargo, aunque el Ministerio alega «pérdida de confianza».

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