España

Picardo: «No toleraremos la vuelta a las conversaciones bilaterales entre Reino Unido y España»

El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, se ha mostrado este miércoles escéptico ante el mensaje de España que deja fuera de las negociaciones del Brexit la soberanía del Peñón y ha señalado que su Ejecutivo se mantendrá «alerta» para asegurar que esta posición se mantiene.

«Siempre hemos sido claros a la hora de expresar que únicamente discutiremos la soberanía de Gibraltar con el Gobierno de Reino Unido», ha enfatizado Picardo, quien ha recalcado que no tolerarán «el retorno a un proceso de conversaciones bilaterales entre el Reino Unido y España» sobre la soberanía del Peñón.

Durante un discurso televisado a la nación bajo el título ‘Un año antes del Brexit’, el ministro principal de Gibraltar ha asegurado que estarán «vigilantes» ante la marcha de las negociaciones sobre la salida de Reino Unido de la UE y sobre el periodo de transición, que comenzará el 29 de marzo de 2019 y que, según la propuesta actual de Bruselas, terminará el 31 de diciembre de 2020.

En este punto, Picardo ha recordado que aunque su Gobierno ha establecido una relación de confianza con Theresa May y su equipo, «también es cierto que Gibraltar se ha visto decepcionado por Reino Unido en el pasado». Y, en esta línea, también ha apuntado que igualmente se sintieron «muy decepcionados y contrariados» con la UE por pretender hacer al gobierno español participe de la decisión de la aplicación a Gibraltar de los acuerdos post Brexit.

El ministro principal del Peñón se ha referido así a la cláusula 24 de las directrices de la UE, según la cual «después de que Reino Unido abandone la UE, ningún acuerdo entre la UE y Reino Unido podrá aplicarse al territorio de Gibraltar sin un acuerdo entre el Reino de España y Reino Unido».

En este sentido, ha trasladado su compromiso de establecer «nuevas líneas de cooperación» con la UE y, en particular, con España «a pesar» de esa cláusula y «no a causa de ella». «Continuaremos ofreciendo la construcción de buenas relaciones con nuestro vecino y el aumento de la prosperidad regional, no porque nos sintamos amenazados, sino porque esa es nuestra naturaleza. Y continuaremos buscando establecer nuevas sinergias para el futuro y evitar la confrontación innecesaria porque ese siempre ha sido nuestro enfoque», ha recalcado.

En la misma línea, ha reiterado que Gibraltar «nunca ha buscado ningún otro tipo de relación» con España que la cooperación «a pesar de que hemos sido rechazados a menudo» y, aunque ha admitido que no será «sencillo», ha dejado la puerta abierta a que se pueda lograr.

«Quizás las dificultades que el Brexit podría ocasionar para las personas normales de ambos lados de la frontera finalmente logren concentrar las mentes de los políticos cuya retórica se ha originado muy lejos de esta frontera. Quizás este momento vaya a ser finalmente un punto de inflexión. Puedo deciros que estamos trabajando muy duro para buscar soluciones y no para producir titulares de prensa», ha apostillado.

Puntos irritantes

También se ha referido durante su intervención a las denominadas «cuestiones irritantes» históricas que España ha puesto en la mesa de negociación para repasar el «listado de cuestiones históricas que han sido ‘puntos irritantes’ para el pueblo de Gibraltar desde hace tiempo» y que, según ha dicho, ahora «buscaremos abordar de modo concluyente».

Entre ellas, el aeropuerto gibraltareño, una cuestión sobre la que España quiere la «gestión conjunta». Desde el Peñón se ha defendido que el uso compartido «sería posible» si Madrid cumple las obligaciones contraídas en los acuerdos de Córdoba de 2006, de los que España se salió en 2011, y que permitieron la construcción del aeródromo por valor de 84 millones de libras.

También se ha mostrado abierto a abordar «de modo justo» con España sobre la capacidad de acceder al Cielo Único de la UE incluso tras nuestra salida de la UE, la retirada de las listas negras de servicios financieros españolas o cuestiones relativas al tráfico en la frontera.

Sobre este último punto, ha recordado que buscan una solución que ofrezca una fluidez continua en la frontera, algo que también pretende España, y ha llamado a alcanzar «un acuerdo detallado sobre el mecanismo más adecuado para alcanzar este objetivo común». «Esta cuestión resulta de vital importancia, no solo para los trabajadores transfronterizos, sino también para nosotros, los gibraltareños, los turistas y la ciudadanía en general. Y su importancia no se basa únicamente en una cuestión comercial, sino también humana», ha alegado.

«Aún es posible que estos parámetros nos permitan colaborar dentro de nuestras líneas rojas establecidas e inamovibles para encontrar un terreno común con todas las partes relevantes durante este proceso multilateral de salida de la UE. Alcanzar el éxito no será una tarea sencilla. Será difícil. Pero del mismo modo, se trata de una meta que tenemos la obligación de intentar alcanzar», ha recalcado.

En cualquier caso, ha asegurado tener «plena confianza» en que el Acuerdo de Salida será «plenamente aplicable» a Gibraltar y en que los mecanismos para una salida ordenada y el acceso continuo al mercado único de la UE incluirán «por completo» al Peñón, «al menos hasta el final del periodo de transición».

«Trabajaremos para ofrecer soluciones que preserven todo aquello que resulta importante para nosotros, especialmente nuestra Soberanía, única y exclusivamente británica», ha concluido.