El PP prepara actos en solitario de Aznar y Rajoy para reforzar las provincias clave para el 28-A

Pablo Casado contará con José María Aznar y Mariano Rajoy en su campaña. Ambos líderes han mostrado su disposición total a apoyar al candidato, de cara a contribuir en aquellas provincias en las que puedan aportar más.

La estrategia, según explican fuentes de Génova, es que no coincidan, ni entre ellos ni con el propio candidato a La Moncloa, en el objetivo de «diversificar esfuerzos». Lo que denominan una campaña «en racimo».

Esa táctica se ensayó ya en las autonómicas gallegas y andaluzas. Los buenos resultados de entonces han llevado a la dirección nacional a repetir, ante unos comicios cruciales. Ello implica que la planificación de mítines y actos se hará evitando que los dirigentes coincidan, de forma que se puedan optimizar los esfuerzos y llegar a más lugares en un tiempo limitado.

Rajoy tendrá una fuerte presencia en Galicia, una comunidad favorable a los intereses del PP. Así, el primer día de campaña, 12 de abril, estará en Pontevedra, junto a Ana Pastor, número uno por la provincia y el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo.

Ese mismo día, el presidente del PP presentará el programa electoral en Barcelona. Un acto que la dirección reviste de un especial simbolismo: «Sánchez no habla de Cataluña en su propuesta, pero nosotros sí», afirman.

Aunque la agenda aún no está cerrada, la previsión es que Rajoy tenga también presencia en Andalucía o Castilla y León,  y también en la Comunidad Valenciana, donde el 28 de abril se celebran elecciones autonómicas. Comunidades también receptivas al discurso de los ‘populares’.

Aznar ya ha iniciado campaña

Por su parte, José María Aznar acudirá a algunos lugares clave, como Barcelona, donde acompañará a la número uno por esa circunscripción, Cayetana Álvarez de Toledo.

Aznar ya ha tenido un fuerte protagonismo antes incluso de comenzar la campaña. El ex presidente mostró la pasada semana su rotundo descontento con VOX y advirtió de los riesgos de dispersar el voto de la derecha. «A mí nadie me habla de una derechita cobarde mirándome a la cara porque no me aguantan la mirada», espetó, en un acto en Valencia.

En su intervención, en clave claramente electoral, Aznar avisó de que «o se concentran los votos en el PP» o «el precio» será «el indulto de los golpistas y una consulta en Cataluña».