Bildu pide a los presos de ETA que movilicen a su entorno ante el 21-A: «Estamos ante una ocasión única»

EH Bildu también juega su campaña electoral en las cárceles del País Vasco. Hasta allí, en los últimos días, ha enviado emisarios la formación de Arnaldo Otegi en busca de la complicidad del colectivo –y todo el entorno que arrastra– de cara a las próximas elecciones vascas. Fuentes penitenciarias apuntan a que en esos encuentros se ha trasladado la idea de que el momento actual es «único» para la izquierda abertzale y para uno de sus objetivos prometidos por escrito en cartas firmadas por el propio Otegi a los presos: sacarles de prisión cuanto antes. Y si Bildu gobierna, ese plan tomará un impulso nunca antes visto.

Las prisiones vascas vuelven a recibir visitas de emisarios en nombre de Bildu. Al menos dos de ellas, Zaballa (Álava) y Martutene (Guipúzcoa), han sido escenario de encuentros entre representantes de la formación abertzale y presos de ETA «con perfil de portavoces». Las fuentes penitenciarias consultadas por OKDIARIO evitan ponerle nombre a los visitantes y a sus interlocutores, ya que eso supondría una falta grave a su código interno. Pero confirman la existencia de dichos encuentros.

Los encuentros se celebran coincidiendo con la precampaña electoral vasca y con el primer aniversario del fin de la dispersión, del que se cumple un año el 24 de marzo. Ese día, viernes «de dolores» como se les llamaba en el entorno de las víctimas de ETA por el sufrimiento que les provocaban estos acercamientos, fueron trasladados al País Vasco los cinco últimos presos de la banda terrorista que aún cumplían condena en cárceles de otras comunidades autónomas. Entre ellos, Irantzu Gallastegi, alias Amaia, pareja sentimental y criminal de Javier García Gaztelu, alias Txapote. Su cómplice en el asesinato del concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco y muchas otras víctimas más.

Según estas fuentes penitenciarias, pese a que esos encuentros se producen en un ambiente de «privacidad» -que no se permite a todos los presos de estos centros-, sí han trascendido a nivel interno algunos de los mensajes llevados intramuros de la prisión por los emisarios de Bildu.

La consigna ha circulado por los módulos autogestionados donde residen la mayoría de presos de ETA: las próximas elecciones son una «oportunidad única» para todo el colectivo. Una llamada a la acción electoral para que los propios presos colaboren, en la medida de sus posibilidades, en agitar el caladero de votos de su entorno en favor de EH Bildu y su candidato, Pello Otxandiano. Hombre procedente de Sortu, el ala más proetarra de Bildu y familia política, también, de Otegi.

Homenajes a presos

Mientras, la llamada Korrika, la marcha en defensa del euskera y organizada por el separatismo vasco e impulsada por Bildu, ha vuelto a convertirse este año en un homenaje proetarra al exhibir las figuras de presos de ETA condenados por delitos de sangre. Así lo ha denunciado el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite). En varios puntos del País Vasco se ha celebrado esta carrera en la que se han exhibido figuras como la de Javier García Gaztelu, alias Txapote, el etarra más sanguinario que participó en medio centenar de crímenes como los de Miguel Ángel Blanco o Fernando Múgica.

La asociación AEK es la encargada de organizar esta marcha a favor del euskera que luego se acaba convirtiendo en un evento proetarra. Esta asociación «trabaja en la normalización de la lengua vasca, y desarrolla su labor en todos los campos necesarios para ello: en el conocimiento, en el uso y en la promoción del idioma». «Nuestro fin último es que toda la población de Euskal Herria pueda vivir en euskera con total comodidad», sostiene.

Este evento siempre cuenta con el apoyo de los dirigentes de Bildu como Arnaldo Otegi y de sus aliados electorales. «En definitiva, otra edición más de la Korrika en la que se pervierte su propósito y se convierte en un festival de apoyo público a los etarras presos. Pura legitimación del terrorismo con el silencio de la mayoría de instituciones vascas y con la complicidad de la AEK», denuncian desde Covite.

La Korrika se ha llevado a cabo en Bilbao, Galdácano (Vizcaya), Berango (Vizcaya), Ondárroa (Vizcaya), Lequeitio​ (Vizcaya), Lasarte-Oria (Guipúzcoa), Usúrbil​​ (Guipúzcoa), Hernani (Guipúzcoa) y Portugalete (Vizcaya).

En Bilbao se exhibieron imágenes de Jon Igor Solana, Harriet Iragui, Beatriz Etxebarria, Asier Mardones y Liher Rodríguez. «Todos condenados por asesinato excepto Liher Rodríguez y Asier Mardones», afirma Covite. En esta ciudad también se vieron figuras de presos de ETA como Fernando García, Arkaitz Agirregabiria y Garikoitz Aspiazu, entre otros. «Garikoitz Aspiazu fue jefe de ETA y el resto están condenados por asesinato», esgrime el colectivo de víctimas del terrorismo