Economía
Huelga de Ryanair

Los sindicatos se reunirán con Ryanair el 7 de septiembre pero amenazan con nuevas huelgas

Los representantes de USO Sector Aéreo han anunciado mediante una nota de prensa que los sindicatos convocantes de las huelgas se reunirán el próximo viernes 7 de septiembre en Roma con Ryanair para «analizar el resultado de las dos jornadas de paro y la evolución de las movilizaciones de otros colectivos y países durante estas semanas». Además, advierten, «se tomarán las decisiones conjuntas de cara a nuevas movilizaciones europeas».

“En esta ocasión, y tras la huelga de tripulantes de cabina y la de pilotos en países como Alemania, Holanda, Bélgica, Suecia e Irlanda, en este caso el pasado día 10”, relata Ernesto Iglesias, responsable de Vuelo de USO Sector Aéreo, “a la reunión de Roma acudirán sindicatos de todos los países donde Ryanair opera y de todos los colectivos que quieran participar en acciones conjuntas. Durante las próximas semanas, se seguirá en conversaciones dirigidas a una huelga global en la compañía”.

En el informe del primer trimestre a sus accionistas (siguiendo el calendario fiscal irlandés, correspondería al segundo en España), los dirigentes de Ryanair destacaban que, a pesar de las pérdidas por las huelgas, resulta más rentable asumirlas que hacer concesiones a las demandas de los trabajadores. “Si esta es la política de recursos humanos de la empresa, quizá nos estén diciendo que hasta que las pérdidas por las huelgas no sean superiores a ofrecer unas condiciones dignas a su plantilla, no se decantarán por esta opción. Entonces debemos entender que a su paripé de negociaciones solo se puede responder con huelgas constantes hasta que entiendan lo irreversible de la situación en materia de derechos laborales y se tomen en serio la labor de mediación de la Dirección General de Trabajo, en el caso de España”, vaticina Iglesias.

El 5 de septiembre, USO, Sictpla y los representantes de Ryanair están citados por la Dirección General de Trabajo en Madrid para una nueva mediación, después de que el último intento, el 1 de agosto, finalizase sin ningún acuerdo y desde Trabajo se diese agosto por inhábil.