Economía
Ayudas directas

Sánchez promete 4.459 millones para digitalizar pymes mientras se niega a rescatar a la hostelería

Mientras países como Alemania ya han anunciado ayudas por más de 10.000 millones de euros para rescatar a las empresas tras el impacto de la crisis del covid-19, el Gobierno de Pedro Sánchez no ha movilizado ni un solo euro en ayudas directas, a pesar de que las previsiones que se realizan desde la patronal muestran como miles de pequeñas empresas van a tener que echar el cierre ante las restricciones. Así, el Ejecutivo, deja huérfanos a los establecimientos más afectados por esta pandemia pero promete 4.459 millones para digitalizar pymes.

El presidente del Gobierno ha anunciado este plan de ayudas que se enmarca dentro del Plan de Digitalización de Pymes (2021-2025), que contará hasta 2023 con una inversión de 4.656 millones de euros, de los que 4.459 se corresponden con ayudas directas, pudiendo llegar a beneficiar  a 1,5 millones de empresas medianas, pequeñas y autónomos.

Este plan para pymes contempla la puesta en marcha de varios programas, uno de ellos, el ‘Digital Toolkit’ dotado de 3.000 millones para promover el comercio electrónico, la digitalización de las relaciones con la Administración y con los clientes, además del desarrollo de procesos, como la factura electrónica, según fuentes del Gobierno.

Además se contemplan además ayudas de 50 millones de euros para ‘Bonos Conectividad’, para que tengan conexión a internet; así como la puesta en marcha del programa «Agentes del Cambio», con 300 millones de euros, y que servirá para financiar la incorporación de profesionales en transformación digital en pymes para desarrollar su plan de digitalización.

Estos agentes del cambio se podrán haber formado, a su vez, a través del ‘Programa de Expertos’ que cuenta con 100 millones para formar a jóvenes expertos en digitalización de las pymes. Además, se contemplan una serie de medidas para impulsar el emprendimiento, con un presupuesto de 182 millones, que servirá para la creación de la Oficina Nacional de Emprendimiento, apoyar la creación de startups por mujeres; o para el despliegue de una red de centros de apoyo al emprendimiento.

Un sector en caída libre

Los empresarios españoles se encuentran al límite como consecuencia de la crisis del coronavirus. El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha pronosticado este lunes de que serán «miles de empresas las que tengan que echar el cierre por la crisis de la Covid». A su juicio, es necesario que el Gobierno y el resto de administraciones activen ya, cuanto antes, ayudas directas y medidas para poder garantizar la continuidad y la competitividad de la actividad empresarial.

Garamendi, que ha participado en un acto en la ciudad de Burgos, ha hecho hincapié en la necesidad de apoyar al sector turístico de un modo expreso para que siga siendo una actividad «esencial» en España en el futuro.

El presidente de CEOE ha insistido en la necesidad de no desechar el potencial del turismo por la actual crisis sanitaria y ha pedido que se focalicen los esfuerzos en las necesidades de España, ya que presenta retos «muy por encima de otros países».

Los empresarios se encuentran muy preocupados, especialmente, por la alta tasa de desempleo juvenil que se observa a nivel nacional, de un 45%, que supone que uno de cada dos jóvenes se encuentra en situación de desempleo. Según Garamendi, «son los jóvenes quienes representan el presente y el futuro». Y pide la colaboración entre las administraciones y los agentes sociales para solventar la grave crisis laboral que afrontan los que se incorporan al mercado laboral español.

Asimismo, el presidente de CEOE ha hecho alusión en su intervención a la situación en la que se encuentran muchos trabajadores del sector servicios, ya que en España hay mucha gente vinculada a su actividad, lo que supone que muchos de los actuales expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) se relacionen con este gremio en el que tiene un gran peso tanto el turismo como la hostelería.

En cuanto a las medidas para frenar la negativa evolución de la pandemia, Antonio Garamendi ha abogado por la realización de test masivos prolongados a lo largo del tiempo y ha insistido en que «este debe ser el objetivo». Garamendi ha defendido los test como «un buen instrumento» para implementar también durante el periodo de vacunación y ha recordado que el personal de las mutuas, que representa unas 10.000 personas en nuestro país.

En este sentido, también ha pedido a las administraciones públicas que no olviden el potencial de la sanidad privada y ha recalcado que sus profesionales, al igual que los de las mutuas, pueden y deben colaborar en la realización de pruebas y la vacunación.