Economía
Jornada laboral

La reducción de jornada laboral podría destruir este sector: nadie sabe cómo sobrevivirán

El plan del Gobierno español de reducir la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales sin afectar los salarios ha generado una fuerte reacción en el sector empresarial. La medida, impulsada por el Ministerio de Trabajo y los sindicatos mayoritarios, fue recibida con escepticismo por la patronal.

Y es que estos últimos, advierten sobre las dificultades que podría generar, especialmente en sectores con estructuras de trabajo particulares. Sin embargo, su aplicación podría ser especialmente desafiante en algunos sectores donde la carga laboral es continua y las jornadas se extienden más allá de los límites convencionales.

¿Cuál es el sector que podría complicarse con la reducción de jornada laboral?

Mientras que el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, defiende la propuesta, asegurando que se trata de una «magnífica prioridad» para el Ejecutivo, uno de los sectores que podría verse más impactado por la reducción de jornada laboral es la industria panadera.

La mayoría de las panaderías tradicionales en España funcionan como negocios familiares, con horarios que comienzan en la medianoche y se extienden hasta la mañana.

Algunas de las claves de su funcionamiento son:

Ahora, con la reducción de jornada laboral, el sector deberá reorganizarse para cumplir con el nuevo límite de horas sin reducir su producción ni aumentar los costes laborales.

Esto podría traducirse en la contratación de más personal, algo que no todas las panaderías podrán afrontar económicamente.

El rechazo a la medida de reducción de jornada laboral

La Confederación Española de Panadería, Pastelería, Bollería y Afines (CEOPPAN) también expresó su rechazo al anteproyecto de ley del Gobierno. Según la organización, la reducción de la jornada laboral podría poner en peligro la viabilidad de muchas micro, pequeñas y medianas empresas del sector de la panadería y repostería artesanal y tradicional.

En un comunicado oficial, CEOPPAN destacó que el sector agrupa más de 12.000 empresas en toda España, con más de 35.000 puntos de venta propios. En su mayoría, estos negocios son establecimientos familiares y forman parte fundamental del comercio de proximidad y la economía circular en ciudades y pueblos del país.

Desde la organización han señalado que, en los últimos años, el sector ha invertido en modernización y sostenibilidad, a pesar de los desafíos impuestos por la competencia de la panadería industrial, supermercados y franquicias.

A esto se suman los efectos económicos de la pandemia y el aumento de los costes de producción, incluyendo energía, materias primas y alquileres. En este contexto, CEOPPAN advierte que la reducción de jornada supondría una carga adicional que podría comprometer la continuidad de muchas empresas y empleos.

Negociaciones colectivas como alternativa

CEOPPAN sostiene que los convenios colectivos sectoriales han sido una herramienta clave para regular la jornada laboral en función de la realidad de cada territorio. Desde hace más de 50 años, las asociaciones del sector han negociado acuerdos que garantizan condiciones justas tanto para empresarios como para trabajadores.

Por ello, consideran que esta vía es la mejor alternativa para evitar que la reducción de jornada laboral afecte negativamente a la competitividad y sostenibilidad de las panaderías y pastelerías tradicionales.

Tras estos motivos, la confederación manifestó su oposición a la medida y alerta sobre el impacto que podría generar en un sector esencial para el comercio de proximidad y la economía local. Para muchas empresas, especialmente las pymes, la nueva normativa podría representar:

¿Cuáles son los otros sectores en riesgo?

El impacto de la medida no se limitará al sector panadero. Otras industrias también enfrentarán ajustes significativos: