Economía
Pensiones

La lista completa de jubilados que van a cobrar 300 euros más en su pensión: las claves

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Este año 2024, las pensiones no contributivas han aumentado un 6,9%, mientras que las contributivas lo han hecho en un 3,8%. Las pensiones de viudedad con cargas familiares han experimentado un aumento significativo del 14%. El objetivo es que las pensiones no contributivas alcancen al menos el 75% del umbral de pobreza, definido como el 60% de la media de ingresos anuales por unidad de consumo, para 2027.

Para lograr este objetivo, el objetivo es que las pensiones no contributivas aumenten anualmente en un 18,24% desde 2025. Esta estrategia busca evitar que quienes dependen de estas pensiones caigan en la pobreza y la exclusión social, asegurando así una red de seguridad económica para las personas más vulnerables del sistema.

Pensiones no contributivas

La pensión no contributiva es una ayuda económica dirigida a personas que, ya sea por jubilación o invalidez, no han alcanzado los años mínimos de cotización para acceder a una pensión contributiva. El propósito de esta prestación es ofrecer un sustento básico, junto con cobertura médica y farmacéutica gratuita, financiada por los Presupuestos Generales del Estado.

Existen dos variantes: una para personas mayores de 65 años que no han cotizado lo suficiente para recibir una pensión de jubilación, y otra para aquellos entre 18 y 65 años con una discapacidad superior al 65%.

Requisitos

Para poder beneficiarse de la pensión no contributiva de jubilación, los solicitantes deben tener al menos 65 años y haber vivido en España por lo menos 10 años, de los cuales dos deben ser continuos e inmediatamente previos a la solicitud. Además, los ingresos anuales no pueden superar los 7.250,60 euros en 2024. Si el solicitante convive con familiares, el umbral máximo de ingresos varía según el número de convivientes.

Cuando se convive con cónyuge o familiares de hasta segundo grado, como hijos o padres, los ingresos máximos permitidos son: 12.326,02 euros anuales si hay dos personas, 17.401,44 euros para tres convivientes y 22.476,86 euros si son cuatro o más personas. En casos donde se convive con familiares de primer grado, como hijos o padres, los límites se elevan considerablemente, llegando hasta los 30.815,05 euros para dos personas y 43.503,60 euros para tres.

La cuantía de la pensión no contributiva se ajusta según el número de personas que la reciban en la unidad familiar, con un mínimo garantizado de 1.812,65 euros al año, lo que representa el 25% de la pensión completa establecida para 2024.

Este sistema de pensiones está diseñado para garantizar un apoyo económico a las personas más vulnerables, evitando su exclusión social y permitiendo una vida digna sin importar sus cotizaciones previas.

Solicitud

La tramitación y gestión de estas pensiones es competencia de las comunidades autónomas, las cuales han asumido las funciones del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso). En las ciudades de Ceuta y Melilla, la responsabilidad recae directamente en el Imserso. Los interesados pueden solicitar esta prestación en las oficinas de Servicios Sociales de su comunidad, en los centros del Imserso o en cualquier oficina de la Seguridad Social.

2025

De acuerdo con las proyecciones del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en 2025 se prevé un nuevo incremento que beneficiará a un amplio número de pensionistas. Este ajuste, nuevamente relacionado con el IPC de noviembre, se traduce en un aumento mensual cercano a 29 euros, lo que equivale a un incremento anual de aproximadamente 350 euros para las pensiones mínimas.

Particularmente, las pensiones no contributivas, destinadas a aquellos que no han cotizado lo suficiente para recibir una pensión contributiva, recibirán un aumento más significativo. Casi 500.000 pensionistas se beneficiarán de esta subida, que forma parte de una reforma que busca mejorar las condiciones de vida de quienes dependen de estas prestaciones. La reforma prevé incrementos escalonados hasta 2027, con ajustes que dependen de la situación familiar del beneficiario.

Los incrementos previstos para las pensiones no contributivas son los siguientes: en 2025, alcanzarán 542,85 euros al mes, lo que suma 7.600 euros anuales. En 2026, se elevarán a 564,28 euros mensuales, totalizando 7.900 euros anuales. Para 2027, la cantidad mensual llegará a 592 euros, es decir, 8.250 euros anuales.

Además, se han establecido umbrales de ingresos anuales ajustados según la unidad familiar.Para aquellos que conviven únicamente con un cónyuge o parientes consanguíneos de segundo grado, los límites de ingresos son los siguientes: con dos convivientes, el ingreso anual no debe exceder los 12.326,02 euros.

En el caso de tres convivientes, esta cifra asciende a 17.401,44 euros anuales. Finalmente, si hay cuatro convivientes o más, el límite se establece en 22.476,86 euros al año.

Por otro lado, si en la unidad familiar se incluyen alguno de los padres o hijos del pensionista, los límites de ingresos anuales aumentan considerablemente. Para dos convivientes en esta situación, el ingreso máximo permitido es de 30.815,05 euros.

Para tres convivientes, el límite se eleva a 43.503,60 euros anuales. Por último, en el caso de cuatro convivientes o más, el umbral se fija en 56.192,15 euros al año.

En definitiva, la pensión no contributiva garantiza un sustento básico a personas sin cotización suficiente para acceder a una pensión contributiva, brindando apoyo económico y acceso a servicios de salud.