Economía
Ni un año fuera de la empresa

¿Iger puede ser el Steve Jobs de Disney? Llega con el beneficio hundido y la acción en caída libre

Bob Iger dejó de ser consejero delegado de Disney el 25 de enero de 2020 para pasar a ser el presidente ejecutivo hasta el 31 de diciembre de 2021. Bob Chapek ocupó el cargo de CEO y Susan Arnold el de presidenta. Menos de un año después, Chapek es despedido e Iger vuelve a tomar las riendas de un negocio hundido con las acciones en mínimos de 20 años.

La vuelta de un antiguo primer espada de una compañía no es algo extraño en Wall Street y el mercado de pregunta si la vuelta de Iger podrá ser tan brillante como la de Steve Jobs en 1997 a Apple. La compañía de la «manzana mordida» es ahora la empresa más grande en lo que a capitalización se refiere y el gran referente tecnológico junto con Microsoft. Vale en el Dow Jones, el parqué que aglutina a las cotizadas más grandes del mundo, 2,4 billones de dólares.

Disney cotiza en el mismo selectivo y sus acciones perdían más de un 40% desde enero para cotizar por debajo de los 90 dólares por acción antes de conocerse el regreso de Iger. Es el segundo componente del Dow Jones que más cae en lo que va de año, solo por detrás de la compañía de software Salesforce, que pierde más de un 50%.

El retorno de Iger, que ocupó el cargo de consejero delegado durante 15 años, se produce un par de semanas después de que Disney decepcionase con sus resultados. La pandemia, por el cierre de parques temáticos, destrozó las cuentas de la compañía, pero la vuelta a la normalidad no termina de levantar los resultados como los expertos creen que debería y el lanzamiento de la plataforma de vídeo Disney+ está dañado, entienden los expertos.

Igor, artífice del lanzamiento Disney+, comprueba como la plataforma perdió 1.500 millones de dólares al cierre de su cuarto trimestre fiscal, que terminó en octubre, el doble que el año anterior pese al crecimiento de suscriptores. Aún no ha logrado beneficios desde 2019 y no se espera que lo consiga hasta 2024.

El beneficio anual creció un 58% y la facturación se elevó un 23%, por la vuelta a la normalidad en los parques temáticos, pero no superaron las expectativas de los expertos. Sobre todo las cifras del cuarto trimestre donde el beneficio por acción (BPA), una métrica muy seguida por los inversores, concluyó en 0,30 dólares por acción frente a los 0,55 dólares calculados por el consenso. Los títulos cayeron un 13% en una sola sesión hasta cerrar en mínimos de 20 años, en 86,75 dólares, el peor precio en dos décadas.

«A medida que Disney se embarca en un período cada vez más complejo de transformación de la industria, Bob Iger se encuentra en una situación única para liderar la compañía a través de este período crucial», así le dio la bienvenida Arnold a un Iger que también estuvo detrás de la compra de la división de entretenimiento de Fox, Marvel (con sagas como X-Men o Los Vengadores), Lucasfilm (Star Wars) y Pixar (Toy Story). Steve Jobs fue uno de los fundadores de la productora y compañía cinematográfica de animación Pixar.