Economía
Ahorro

Horario de verano 2022: el ahorro que puedes hacer con el cambio de hora

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

En España ya sabemos de qué hablamos cuando decimos que hay que cambiar la hora. Lo hacemos desde 1973 y, dos veces al año. En marzo y octubre se cambia la hora al horario de verano o de invierno. Esto sucede el último domingo de marzo y el último domingo de octubre.

Este 27 de marzo, próximo domingo, tendremos que adelantar la hora de nuestros relojes de 2 de la mañana a 3 de la mañana. Así le daremos la bienvenida al horario de verano.

Según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la energía (IDAE), gracias al cambio de hora se puede conseguir un ahorro energético del 5% durante los meses de verano. El cálculo en términos monetarios es de unos 6 euros anuales. Aunque dicho así parece una cantidad minúscula, si multiplicamos 6 euros por 24 millones de hogares en España, el ahorro a nivel nacional asciende a 144 millones de euros.

¿El último cambio de hora?

En 2018, la Comisión Europea llevó a cabo una consulta pública para poner fin al cambio de hora. Además, en España se planteó la pregunta de si debíamos continuar con la hora de Alemania o volver a la que realmente nos corresponde, la de Canarias.

En un principio, se planteó acabar con el cambio de hora en 2019. Pero los 27 estados miembro deben ponerse de acuerdo para tener el mismo horario y favorecer el funcionamiento del mercado europeo, y no es fácil llegar a un consenso.

Aunque la fecha límite se suponía que terminaba en 2021, este año se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que el cambio de hora continuaría hasta 2026. En España se organizó un comité de expertos sobre si era mejor quedarse con el horario de invierno o de verano, pero tampoco alcanzaron un acuerdo. La opinión mayoritaria es que España se quede con el horario de verano.

Consejos para ahorrar luz en verano

Para reducir el gasto en la factura de la luz y, aprovechar el cambio de hora,  es mejor contratar una potencia adecuada al consumo. Por supuesto, hay que utilizar siempre bombillas LED de bajo consumo ya que suponen un ahorro de hasta el 80% con respecto a las convencionales y, además, duran mucho más tiempo.

Para hacer tareas focalizadas, como leer o estar en el ordenador, conviene tener lámparas de pie o de mesa. El aislamiento térmico es muy importante, tanto en verano como en invierno, así que instalar unas buenas ventanas es una excelente inversión para evitar tanto el frío o el calor.

En lo que respecta a los electrodomésticos, deben ser de bajo consumo y, siempre que sea posible, lo ideal es utilizar programas ecológicos.

Con el cambio al horario de verano hay más horas de luz, por lo que no es necesario tener encendidas gran parte de las luces de la casa. Por ello, lo mejor es aprovechar dichas horas para hacer gran parte de las tareas de la casa.