Economía
Gran Vía

La guerra por el Edificio España se mantiene abierta entre Riu y Baraka

La constructora Baraka ha alertado al nuevo Gobierno del Ayuntamiento de Madrid que lidera José Luis Martínez-Almeida del riesgo de derrumbe del Edificio España. El grupo que lidera Trinitario Casanova ha mostrado, a través de una carta, su preocupación por las obras de rehabilitación que se están produciendo en el céntrico edificio madrileño por parte del grupo hotelero RIU, que se muestra muy confiado en que, pese a todo, a mediados de julio estará abierto el hotel.

El comunicado remitido por Baraka alerta sobre «la gravedad de las obras mal ejecutadas en el Edificio España, así como el riesgo de derrumbe de su fachada, tal y como acredita el informe de Intemac, junto con los motivos que llevaron en su momento a la renuncia de su Dirección Facultativa».

Desde RIU explican a OKDIARIO que se trata de una «maniobra oportunista». «Ha habido un cambio de Gobierno en Madrid y ha aprovechado para enviar una carta. Por otra parte, el Ayuntamiento de Madrid ya desestimó los requerimientos de Trinitario, que ya pretendía tramitar las obras indefinidamente, pero esto ya se desestimó y, además, el Juzgado de Primera Instancia número 67 de Madrid falló a favor de RIU y consideró que Casanova carecía de la legitimación», señalan fuentes de la hotelera.

«Todo está conforme a la licencia y seguimos con los planes de apertura para julio. De hecho, han sido condenados al pago de la totalidad de las costas. No creemos que ya tenga más recorrido. Nosotros seguiremos igual y a mediados de julio abriremos el hotel», concluyen desde RIU.

Por su parte, desde Baraka insisten en que la seguridad del inmueble está «seriamente comprometida» y advierten de la existencia de «un riesgo grave y cierto para la vida de las personas, por haber prescindido la propiedad de la obra de partidas completas de refuerzo de estructura y fachada sin ejecutar otras medidas distintas pero válidas desde el punto de vista técnico y no adecuarse, en fin, la obra a la normativa vigente en materia de seguridad de estructura, se solicita la inmediata paralización de las obras hasta que se verifique por la Dirección general que la obra cumple con la normativa vigente».

Cabe recordar que Baraka y RIU firmaron un acuerdo, en junio de 2017, a través del cual el grupo de Trinitario Casanova vendería el famoso edificio madrileño a la firma hotelera, justo después de comprárselo él al grupo chino Wanda. Y es que, recuerden, la firma liderada por Wang Jianlin renunció a su proyecto hotelero ante la negativa de Manuela Carmena de permitirle desmontar la fachada protegida del edificio.

RIU, sin embargo, decidió acometer el desarrollo de un hotel, que será de cuatro estrellas, con casi 600 habitaciones, en plena Gran Vía madrileña y manteniendo la fachada.