Economía
EL EQUILIBRIO PRESUPUESTARIO

Los expertos creen que «la nueva subida de las pensiones empujará el déficit y nos enfrentará con la UE»

La nueva subida de las pensiones en el entorno del 4% el año próximo «empujará al alza el déficit público y nos enfrentará tarde o temprano con la UE», según los expertos consultados por OKDIARIO. El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, ya ha anunciado que prevé revalorizar las pensiones en 2024 en una horquilla entre el 3,5% y el 4,5%, según cuál sea el resultado del Índice de Precios al Consumo (IPC) que publica hoy viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE).

A su juicio, y una vez conocidos los datos de inflación los nueve primeros meses del año, las variaciones que se puedan producir en estos últimos meses no se prevén acusadas, por lo que ya se puede intuir la horquilla en la que se moverá la revalorización de las pensiones del próximo ejercicio. Esta la segunda vez en que se produce un incremento de las pensiones tras la reforma impulsada por el presidente Sánchez y el ministro Escrivá con el objetivo de indiciarlas definitivamente a la evolución de los precios. La reforma, que contó con el apoyo de los sindicatos pero el rechazo total de la patronal de empresarios CEOE, ha alarmado a todos los expertos.

En opinión de José Antonio Herce, uno de los mayores conocedores del sistema de Seguridad Social de España, «después de la reforma, las pensiones subirán lo que haga falta para tener cautivo el respaldo político de los pensionistas, pero tal estrategia va a dañar el déficit público, que está entre los más altos de la UE, al tiempo que los ingresos del sistema se van a ver castigados porque la creación de empleo se va a ir ralentizando al mismo tiempo que se frena el crecimiento de la economía y las cotizaciones sociales, aunque se han elevado considerablemente, van a rendir mucho menos».

Adicionalmente, Herce considera que la marcha que llevan las pensiones, que son de largo las más generosas de los países de nuestro entorno en relación con los años de cotización, nos acabarán enfrentando con la UE. «No sólo por la futura implantación de las reglas fiscales, que obligan a reducir el déficit público hasta el 3% del PIB y a reconducir progresivamente la deuda del Estado hasta el 60% -cuando ahora está por encima del 100%- sino porque otros países, y destacadamente los más importantes como Francia y Alemania así como los del Norte en general, se van a cansar de financiar el despilfarro del Gobierno español, que es absolutamente privilegiado en términos comparativos».

Pedro Sánchez y María Jesús Montero.

La deriva que han tomado las pensiones, que el año pasado se revalorizaron un 8,5%, al que habrá que sumar otra aproximada del 4% en 2024 -pues los aumentos constituyen una suerte de escalón que hay que integrar en el conjunto del sistema- golpeará duramente la evolución del déficit presupuestario, que este año quedará muy cerca del 4% pero que va a seguir ofreciendo una gran resistencia a la baja durante los próximos ejercicios.

Según las últimas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) publicadas el pasado martes, en el curso de la Asamblea anual que se celebra en esta ocasión en Marraquech, España logrará el próximo año rebajar el desequilibrio de sus cuentas públicas por debajo del umbral del 3%, frente al 3,9% que se prevé en 2023; a medio plazo, sin embargo, el déficit se mantendrá en torno al 3,4% del PIB durante el resto de ejercicios del horizonte temporal de sus proyecciones macroeconómicas, que alcanza hasta 2028. En cuanto a la deuda pública, la institución espera que cierre el presente curso en el 107,3% del PIB, frente al 111,6% de 2022, un nivel todavía entre los más altos de la UE.

Déficit, pensiones e inflación

El economista José Luis Feito asegura que «las subidas reiteradas de las pensiones que habilita la ‘reforma Escrivá’ tendrá unos efectos trágicos sobre el déficit público sobre todo a partir del año próximo. Esto va a ser así porque, además del coste de las jubilaciones, hay que tener en cuenta que la inflación va a ir progresivamente a la baja, y que tal evolución restará gran parte de los ingresos extra obtenidos por el Ejecutivo durante los dos últimos años mientras el gasto público -actualmente disparado- no tiene visos de remitir».

A su juicio, «tarde o temprano tendremos problemas con la UE, estamos condenados a entrar en procedimiento de déficit excesivo que conlleva sanciones en cuanto se reinstalen las reglas fiscales, la subida de los tipos de interés en el presupuesto será notable como consecuencia del incremento del coste del servicio de la deuda y, para más inri, el presupuesto del futuro Gobierno de Sánchez, en caso de que sea investido, tendrá un inevitable sesgo expansivo, dados los aliados que lo van a respaldar, que no tienen clase alguna de preocupación por la higiene presupuestaria».

Como colofón, la subida del 8,5% de las pensiones este año sumará 15.000 millones, y el aumento previsto del entorno del 4% para 2024 tendrá un impacto de otros 7.000 millones más en el presupuesto del próximo ejercicio.