Economía
Energía

Bruselas no logra un acuerdo entre los países para limitar el precio del gas

La Comisión Europea aún no tiene propuestas legislativas concretas que aborden el límite al precio del gas que reclaman una mayoría de países europeos. Los ministros de Energía de la Unión Europea han cerrado este viernes un acuerdo sobre las medidas de emergencia para intervenir el mercado eléctrico comunitario, sin embargo, aún no han decidido nada a cerca de tope al precio de las importaciones de gas.

La comisaria de Energía, Kadri Simson, ha indicado este viernes que una medida para limitar el precio de todas las importaciones de gas al mercado comunitario requeriría de un compromiso claro de reducir el consumo de este combustible más de un 15%, después de que 15 Estados miembros, entre ellos España, hayan instado a la Comisión Europea a tomar esta medida esta semana.

La comisaria ha dicho que para tomar una medida «tan drástica» de una forma «responsable» deberían darse una serie de condiciones «no negociables», entre ellas el compromiso claro de los Estados miembros de reducir el consumo de gas más allá del 15%, fijado en la propuesta del Ejecutivo comunitario del pasado julio.

Otros acuerdos

Por otro lado, en el Consejo de ministros de Energía de la UE de este viernes se ha pactado reducir la demanda eléctrica en la UE un 5% en horas pico, una tasa a las empresas de combustibles fósiles y establecer un límite de 180 euros/MWh al precio al que las productoras de electricidad inframarginales pueden comercializar la energía.

Las medidas, que serán formalmente adoptadas por procedimiento escrito la próxima semana, no entrarán en vigor hasta el día siguiente a su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) y su aplicación se extenderá del 1 de diciembre del presente ejercicio al 31 de diciembre de 2023, si bien Chipre y Malta cuentan con excepciones específicas por su condición de islas energéticas, según informa Europa Press. 

Medidas

Los ministros de Energía han suscrito la propuesta de Bruselas de fijar una reducción obligatoria del 5% de consumo de la electricidad en la franjas horarias de máximo consumo y una disminución del 10% de la demanda de electricidad entre el 1 de diciembre de 2022 hasta finales de marzo de 2023. En todo caso, corresponderá a cada país introducir las medidas apropiadas para alcanzar los objetivos de reducción del consumo durante este periodo.

Además, los Veintisiete han convenido establecer una tasa de «solidaridad» a las empresas intermediarias de combustibles fósiles, como petroleras, gasísticas o el sector del refino. Esta medida fijará una «contribución» del 33% sobre los beneficios obtenidos hasta el 31 de diciembre de 2023 y que se sitúen un 20% por encima de la media de los últimos cuatro años. Este impuesto se articula como una contribución temporal y el importe recaudado se destinará a hogares vulnerables, a las empresas más afectadas y a las industrias electrointensivas.

La tercera de las medidas acordadas por los países de la UE pasa poner establecer un máximo de 180 euros/MWh al precio al que las tecnologías inframarginales, las que producen electricidad por debajo de las productoras de ciclo combinado de gas como las renovables o la nuclear, pueden vender la electricidad en el mercado mayorista (‘pool’).