Botín se suma a Imaz y alerta de la fuga de inversiones si Sánchez sigue su expolio fiscal a las empresas
La presidenta de Banco Santander advierte de que si "se pagan demasiados impuestos, la gente se marcha"
Ana Botín, presidenta de Banco Santander, se ha sumado a las advertencias de Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, y ha alertado de una fuga de inversiones si continúan las subidas de impuestos a las empresas del Gobierno de Pedro Sánchez. «Hay que pagar impuestos, pero si se pagan demasiados, la gente se marcha», ha señalado Botín en línea con las declaraciones de Imaz hace unos días.
Imaz advirtió de paralizaciones en las inversiones de Repsol por el pacto entre PSOE y Sumar de prorrogar el impuesto a las energéticas, que en el caso de la petrolera española ha elevado el porcentaje del Impuesto de Sociedades al 37%, el mayor del Ibex. Repsol ha pagado casi 8.000 millones a Hacienda en los primeros nueve meses del año.
La consecuencia es que Imaz ha puesto en stand by proyectos por valor de más de 1.000 millones de euros, por ejemplo, en hidrógeno, una de las claves del sector energético según los expertos para lograr la descarbonización.
A estas quejas se ha unido Botín. La presidenta de la entidad cántabra ha alertado de que hay empresas que «están pagando más del 50% de sus ingresos al Gobierno», lo que supone una «falta de incentivos» no solo para los residentes en el país, sino para inversores extranjeros.
La banca ha criticado la imposición de este impuesto, previsto inicialmente para 2023 y 2024 pero que ahora PSOE y Sumar quieren hacer permanente si Sánchez consigue la investidura aprobando la amnistía que le pide Junts. La mayoría de bancos han recurrido el impuesto a la justicia ya que reduce la concesión de créditos y grava los ingresos, no los beneficios, como en el resto de Europa.
Sobre el debate entre crecimiento e inclusión, Botín ha afirmado que «no existe conflicto» entre los dos conceptos. «A veces da la sensación de que queremos redistribuir, pero si no crecemos va a haber muy poco que redistribuir», ha defendido.
«Creo que hay una manera que no sea una carrera en la que uno gana y otro pierde, donde se suben impuestos a las grandes empresas para redistribuir. No, se pueden pagar menos impuestos y que a todo el mundo le vaya mejor», ha añadido.
Bogas, Endesa
En la misma línea que Botín e Imaz se ha mostrado este martes José Bogas, consejero delegado de Endesa. En una conferencia con analistas para presentar los resultados trimestrales, Bogas ha señalado que el impuesto a las energéticas es un sinsentido porque discrimina a las empresas españolas sobre el resto de eléctricas europeas, y porque no se ajusta a la normativa europea ya que ésta grava los beneficios no los ingresos.
Bogas ha insistido en que seguirán adelante con los recursos judiciales que han planteado contra este impuesto, y que están pendientes de resolverse.
El Gobierno ha recaudado hasta septiembre un total de 2.794 millones de euros entre los dos impuestos, el de la banca y el energético, según el último informe de Hacienda. Las eléctricas han pagado 1.580 millones y los bancos, 1.214 millones.
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