“Mañana veremos al Karim de siempre”. Así respondió Carlo Ancelotti cuando se le preguntó en la rueda de prensa previa al Clásico por el momento de Benzema, que no marca un gol desde el pasado 28 de agosto, cuando le hizo dos dianas al Espanyol. Después, una lesión le ha impedido demostrar su mejor nivel, pero en el vestuario madridista están seguros de que en el primer gran partido de la temporada se verá la mejor versión de un futbolista que, si no hay sorpresa, el próximo lunes recogerá en París su primer Balón de Oro.
“Está a tope”, aseguran los que mejor le conocen. Es cierto que a Benzema le está costando más de lo normal alcanzar su mejor nivel, pero no deja de mejorar su físico con la única intención de ser ese jugador determinante que la temporada pasada guio al Real Madrid a la conquista de la Liga y de la Champions. Ante el Barcelona quiere marcar la diferencia, pero enfrente tendrá otro goleador nato como es Robert Lewandowski. El polaco llega como máximo goleador del campeonato y con la intención de mandar en la casa de Karim.
El Barcelona, que está tocado, mira a Lewandowski, que con un doblete ante el Inter de Milán ha dado un pequeño hilo de vida a los azulgranas en la Champions. El polaco es el actual máximo goleador de Liga con nueve goles en ocho encuentros, aunque es cierto que en los partidos ante grandes rivales, como fue frente a los interistas en Italia o frente al Bayern de Múnich en Alemania.
Lewandowski se ha enfrentado en ocho ocasiones con el Real Madrid. La primera vez, con el Borussia Dortmund, le hizo un gol en la fase de grupos de la Champions 2012-2013. En semifinales de esa misma edición, marcó cuatro tantos para dejar a los blancos fuera de la final de la Champions. Esas han sido sus mejores noches contra los blancos, ya que con el Bayern se ha medido a los madridistas en dos eliminatorias donde sólo hizo un gol y siempre quedó eliminado. En total, ocho partidos con un balance de tres victorias, dos empates, tres derrotas, seis goles y una asistencia.