Bellingham se estrenó como goleador en una Eurocopa con un gran cabezazo

• Ignacio Sánchez
• 16/06/2024 21:31

Jude Bellingham necesitó tan sólo 13 minutos para poner su primer sello en esta Eurocopa. El centrocampista del Real Madrid afrontaba este torneo como principal cabeza de cartel de una Inglaterra favorita al título. Los Three Lions se enfrentaban a Serbia en Gelsenkirchen, en el Velltins Arena, en el segundo encuentro del grupo C. Un cabezazo potentísimo a pase de Bukayo Saka hizo al ‘5’ blanco anotar el primer gol del encuentro.

Nada más anotar Jude Bellingham, las abarrotadas gradas llenas de ingleses del Velltins Arena cantaban al unísono la mítica canción de Los Beatles y que tantas veces ha sonado esta temporada en el Santiago Bernabéu. Ya saben… «Na, na, na, na, na… ¡Hey Jude!», se podía escuchar en todo el estadio. Con este gol, el inglés se convirtió en el tercer futbolista más joven en anotar en una fase final de una Eurocopa sólo por detrás de dos viejas glorias: Michael Owen y Wayne Rooney. Casi nada.

Corría el minuto 13 de partido y el propio Bellingham iniciaba la jugada desde el centro del campo. Y es que el futbolista del Real Madrid había comenzado el encuentro jugando en todas las posiciones de la medular. Un poco de lo que viene siendo ‘todocampista’. El ex del Dortmund abrió a la derecha a Walker y éste vio el desmarque, también en esa misma banda, de Bukayo Saka. El extremo del Arsenal llegó a línea de fondo y centró. Y ahí apareció Bellingham desde atrás como un camión de mercancías para rematar por toda la escuadra.

Inglaterra salió al encuentro con Pickford en portería, Walker y Trippier en los laterales, Stones y Guehi en el centro de la zaga. Con Alexander Arnold en la medular junto a Declan Rice y el propio Bellingham. Y con Saka, Foden y Kane en ataque. Los pupilos de Southgate vuelven aquí a la carga contra su particular gafe, pese a haber llegado a semifinales en el Mundial de 2018 y también a la final de la pasada Eurocopa, un duro palo perdiendo la final por penaltis en el Estadio de Wembley. En el centro del campo con Declan Rice y las variantes arriba de Cole Palmer y Bukayo Saka dan mucha categoría a una Inglaterra que tiene menos garantías atrás.