La sala de máquinas no carbura: Kroos y Modric ya no mandan

La sala de máquinas no funciona y eso se le nota a un Real Madrid que no carbura. Toni Kroos y Luka Modric, como sucedió en Gerona, volvieron a hacer un partido discreto en Londres y eso lo acabó pagando el equipo blanco que encadenó su segunda derrota consecutiva en apenas tres días.

Mucho se habla de la poca precisión de la delantera y la falta de goles pero al Real Madrid también está faltando juego. En los pocos tantos marcados hasta la fecha puede que tengan responsabilidad Karim Benzema o Cristiano Ronaldo pero en la poca fluidez en el juego madridista hay dos únicos responsables: Kroos y Modric.

Cuando ambos están bien el Real Madrid es otro y ahora el equipo nota la ‘ausencia’ de estos dos jugadores. Ante el Tottenham, Toni Kroos perdió hasta 8 balones, algo que no suele ser habitual bien. Estas malas asociaciones le hicieron tener una precisión en el pase del 90% (80 buenos y 8 malos). Además, participó en 102 ocasiones y realizó un remate desde fuera del área.

Luka Modric tuvo un mayor número de pases exitosos (el 93%) pero en los 81 minutos que disputó sólo pudo participar en 81 ocasiones. Además, el croata no fue capaz de llegar ni siquiera al área rival. En los últimos partidos parece fatigado y cuando Modric no está al 100% el equipo baja el nivel.

Isco, el único que asume galones

Ante la poca presencia tanto defensiva como ofensiva de Kroos y Modric, Isco, como ya hizo ante el Girona, se tiró al equipo a las espaldas y fue el encargado de liderar la mayor parte de las acciones que se realizaron en el centro del campo.

El andaluz bajó para ayudar en la distribución del balón a Casemiro pero también llegó a zonas de ataque. A pesar de que estaba siendo uno de los mejores jugadores del equipo (como en Gerona), Zidane le sustituyó cuando en el electrónico de Wembley se reflejaba un 3-0.