El castigo ejemplar al Panathinaikos tras su ridículo en Euroliga
Dimitris Giannakopoulos, dueño del Panathinaikos, no se andó con medias tintas con sus asalariados después de que cayesen por 3-0 en los cuartos de final de la Euroliga ante el Fenerbahçe. El multimillonario griego canceló el avión de vuelta del equipo de Estambul a Atenas e hizo que todos se montaran en un autobús como castigo por su mala actuación.
El equipo está recorriendo este miércoles los 1.100 kilómetros de distancia en un bus alquilado como represalia. El viaje llevará al equipo estar enlatado durante 16 horas, a diferencia de la hora y 10 minutos que se tarda en avión. El objetivo de Giannakopoulos es que sus pupilos reflexionen sobre cómo han desperdiciado la ventaja de campo obtenida en la competición tras concluir cuartos y haber hecho un papel tan pobre en la ronda del K.O.
No en vano, los jugadores del Panathinaikos iban a recibir una prima de 250.000 euros por barba por alcanzar la Final Four, algo que no ocurrió. El equipo dirigido por el ex técnico culé Xavi Pascual lleva tres años sin ganar una Liga griega y seis sin campeonar en la Euroliga.
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