Jordi Alba demuestra sus ‘valors’: humilla al portero del Leganés y le enseña la manita

Los jugadores del Barcelona han vuelto a demostrar no saber mantener las formas después de una victoria. Jordi Alba, uno de los jugadores destacados del equipo azulgrana, fue captado por las cámaras de Deportes Cuatro burlándose en repetidas ocasiones del portero del Leganés, Jon Ander Serantes, después de que este recibiera cinco goles en la visita culé a Butarque.

«Eres muy malo», le espetó Jordi Alba al cancerbero pepinero, mostrando al mismo tiempo una gran falta de respeto hacia el rival en la victoria y una cobardía que se puso de manifiesto con la acción del lateral de alejarse al mismo tiempo que insultaba a Serantes, para no recibir respuesta alguna por su parte, ni reprimenda del colegiado del encuentro, que en esos momentos miraba hacia otro lado.

Este desagradable improperio hacia un equipo modesto como es el Leganés no quedó ahí, e insistiendo en la figura del portero local, Alba le sacó la manita representando los cinco tantos que el Barcelona le había endosado a un rival que se dejó todo para evitar la goleada ante uno de los grandes, con un presupuesto absolutamente superior al suyo. El internacional español incluso confundió el resultado, fruto de su exaltación, señalando un sexto gol que los culés nunca llegaron a marcar.

En zona mixta, Alba se dio cuenta de la pillada de las cámaras y quiso arreglar su metedura de pata asegurando que «son cosas que se quedan en el campo» y que «el también me dice de todo», algo que no ha podido frenar la difusión de este gesto que el bueno de Jordi suma a su currículum de perlas.

No es la primera vez que un jugador del Barça humilla a un modesto rival después de una goleada. Sin ir más lejos, Neymar se burló de los jugadores del Leganés con 0-5 en el luminoso en el mismo encuentro, realizando filigranas totalmente innecesarias y que no se atrevió a hacer cuando el equipo madrileño apretaba en el inicio. Para el recuerdo queda también el famoso y desagradable baile de Dani Alves y Thiago en el estadio de Vallecas frente al Rayo, que Carles Puyol acudió a frenar.