Deportes
CASO NEGREIRA

El informe de Negreira hijo sobre el árbitro De Burgos Bengoetxea: «Es blando, le falta personalidad»

Javier Enríquez, el hijo del árbitro Enríquez Negreira, hacía informes sobre los árbitros para el FC Barcelona. Documentos que eran usados por el padre como excusa para cobrar cifras millonarias durante varias temporadas al equipo blaugrana. El 20 de abril de 2016 se jugó un Deportivo de La Coruña contra el FC Barcelona. Para ese partido, el hijo de Negreira realizó un informe valorando al cuarteto arbitral, comandado ese día por Ricardo De Burgos Bengoetxea, árbitro todavía en activo en Primera División y con categoría internacional. De hecho, De Burgos Bengoetxea posee el número 1 en el ranking de árbitros actualmente y pitó el último clásico entre Barcelona y Real Madrid del mes de marzo. Sin embargo, Negreira calificó a este colegiado como «blando» y dijo que «le falta personalidad».

Aquel partido contra el Deportivo de La Coruña lo ganó el Barça a domicilio por 0 a 8. Este informe del hijo de Negreira del año 2016 consta de 7 páginas, de las cuales tres están dedicadas a analizar al árbitro de la jornada anterior, en este caso Fernández Borbalán. Sólo uno de los folios está dedicado a los aciertos y errores del árbitro en el anterior partido y lo que tendría que haber pitado según la apreciación subjetiva del hijo de Negreira.

En el caso de De Burgos Bengoetxea el documento ofrece primero la información general del colegiado, como la fecha de nacimiento, su profesión, «protésico dental» en este caso, y alguna filiación familiar como que es «hijo del que fuera árbitro de Primera División Ernesto De Burgos Núñez». Javier Enríquez también cuenta el currículum del árbitro en otro párrafo y opina que es «muy cercano y simple en el trato con la gente, se dedica a pitar fácil y sólo señala lo que tiene muy claro». También hace una advertencia al Barcelona: «Las instrucciones dadas por el Comité Técnico de Árbitros (vicepresidido por su padre) en la última concentración la semana pasada fueron orientadas a distinguir entre las acciones naturales propias del juego (choques, entradas al balón, manos fortuitas) y las acciones que se realizan voluntariamente, como agarrones, entradas a destiempo o por detrás, codazos, etc. Con estas últimas, los árbitros se mostrarán rigurosos durante lo que queda de temporada».

Pero es en el apartado del «perfil técnico arbitral» donde el hijo de Negreira hace la mayor parte de sus valoraciones subjetivas sobre los árbitros como «a veces molesta en el juego, como ya le ocurriera en su último partido al Barça en el campo del Espanyol» y luego añade que «aunque estará atento para evitarlo».

Parte del informe.

El segundo párrafo del perfil es sustancioso en matices. Javier Enríquez dice que De Burgos Bengoetxea «suele sacar los partidos sin problemas por su naturalidad en el trato con los jugadores, más que por su nivel arbitral. Le falta personalidad y experiencia, se recomienda a los jugadores que hablen mucho con él. Necesita la aprobación de los jugadores, por eso da demasiadas explicaciones. Es importante causar buena impresión, le quedan muchos partidos por arbitrar al club».

Las pocas dotes de adivinación del hijo de Negreira quedan patentes en otra parte del documento, donde Javier Enríquez dice sobre el árbitro, internacional y número 1 en el ranking español, que «no dudará en intervenir en cualquier conflicto para calmar a los jugadores. Pero es blando y acaba solucionando todo de manera diplomática. Sería raro que expulsara a alguien por protestar o por alguna tangana». El informe también hace recomendaciones como que «amonestará con rigor las acciones de orden disciplinario (tarjetas), por ello hay que exigirle que amoneste en manos, agarrones o entradas por detrás».