Gonzalo Fernández-Castaño: «Sánchez pidió la dimisión de Rajoy por un caso de ébola y ahora con casi 30.000 muertos aquí no dimite nadie”
Gonzalo Fernández-Castaño (Madrid, 1980) atendió a OKDIARIO desde su residencia en Miami para analizar la realidad del golf en estas semanas de confinamiento y las polémicas decisiones del Gobierno dirigido por Pedro Sánchez
Han pasado 15 años de su irrupción en el circuito profesional, en el que presume de ser ya uno de los veteranos, pero Gonzalo Fernández-Castaño (Madrid, 1980) sigue siendo el mismo. El golfista madrileño atendió a OKDIARIO desde su residencia en Miami, donde permanece confinado y esperando a que la pandemia permita a los profesionales regresar a la competición, el principal deseo de un autónomo que necesita volver a ingresar, y que ve desde la lejanía y sin dejar de lado la crítica las decisiones del Gobierno de Pedro Sánchez.
Pregunta: ¿Como se vive el confinamiento en Estados Unidos?
Respuesta: Nosotros llevamos algo más de un mes confinados, aunque el confinamiento como tal empezó más tarde, pero la gente viendo lo que ocurría en Europa se empezó a confinar casi de manera voluntaria. La única ventaja es que sí te dejan salir para actividades esenciales y para hacer deporte, que parece que no pero se nota, aunque sea con los niños a que tomen un poco el aire. Han reabierto parques, han abierto campos de golf en el condado de Miami Dade, ha sido un poco precipitado para mi gusto.
P: ¿Puede prepararse un golfista desde casa? ¿Ha perdido el toque?
R: Sí. No es lo mismo estar practicando en casa, que yo tengo la suerte de tener un pequeño jardín, pero obviamente el toque se pierde. No es lo mismo pegarle la bola a la hierba que estar pegándole a una moqueta y contra una red, que no ves la bola volar. Sea como sea no es lo mismo, uno quiere salir fuera, estar en el campo de prácticas o en el campo. Y en el aspecto físico, yo me anticipé a la situación y me compré unas pesas, unas gomas… y me he mantenido más o menos en forma.
P: ¿Cambiaría mucho el golf a puerta cerrada? Parece que los aficionados no van a poder asistir a la competición cuando se reanude.
R: El público siempre influye. Es verdad que la hinchada de golf quizá no anima como el Fondo Sur o el Frente Atlético. No es comparable pero un torneo sin público la diferencia es muy notable. Hay veces que estás pegando un golpe ciego, a un green que no ves la bandera, y pegas un golpe y la reacción del público te dice mucho. Se va a notar, sí es verdad que yo creo que el golf tiene una ventaja competitiva, que al no tratarse de un deporte de contacto se puede reanudar antes, y si el hecho de reanudar antes impide que haya público es una desventaja, pero estamos dispuestos a tomarlo.
Estamos desesperados por salir a competir y la gente también lo está por ver deporte en vivo, con lo cual vamos a empezar cuanto antes siempre que tengamos en cuenta la salud de toda la gente que está en un torneo, pero si podemos empezar cuanto antes tenemos que aprovechar ese pequeño nicho. Sin público no va a ser lo mismo, una Ryder sin público no sería una Ryder, o un major… hay determinados torneos en los que el público es fundamental.
P: ¿Qué consecuencias económicas sufre el jugador de golf en el parón?
R: El golfista profesional medio, el bruto de sus ingresos. Los profesionales nos debemos a eso, si jugamos bien cobramos, si jugamos mal no cobramos y si no jugamos, no cobramos. Yo llevo sin ingresar desde diciembre del año pasado, así que está siendo un año complicado. Estamos deseando volver a los campos no sólo por las ganas de jugar, sino que como autónomos que somos tenemos necesidades, y por lo general en un golfista no sólo es tener ingresos para ti, sino que tiene que satisfacer los gastos del preparador físico, del entrenador, el psicólogo, el caddie… Al final el gasto al principio del año es importante, pero entendemos que este es un año muy excepcional y como tal habrá que tomar medidas excepcionales.
P: El golf es uno de los deportes más longevos para profesionales y usted ya va camino de los 40. ¿Cuánto tiempo se ve aún en activo?
R: Que el golf sea un deporte tan longevo tiene sus pros y sus contras. Tiene el pro de que puedes seguir jugando, mira Miguel Ángel Jiménez, hasta los 50 y tantos a un nivel altísimo. Tanto él como Vijay Singh tuvieron sus mejores victorias a partir de los 40 años y eso me da mucha moral. Sí es verdad que tienes el inconveniente de que con una carrera tan larga puedes tener altibajos. Yo en mi caso llevo unos años un poco flojos, especialmente 2019, que fue bastante flojo, pero físicamente me encuentro mejor que nunca, y eso me anima a seguir trabajando, a seguir intentándolo. Si me das cinco o seis años más de carrera sería absolutamente feliz, incluso llegar a los 50. El problema es ser competitivo, antes había un golf amateur y un golf profesional muy diferenciado, hoy hay que hablar de deporte de alto rendimiento, los chavales son semiprofesionales y vienen pisando muy muy fuerte, con lo cual mantenerse dando caña cada vez es más difícil.
P: En España estamos muy ilusionados de cara al futuro con Jon Rahm.
R: No es para menos. Lo que ha conseguido Rahm en tres años de profesional es increíble, a mí no para de sorprenderme, es un jugador al que admiro muchísimo. La primera vez que le conocí da la sensación de subido, de crecido, pero según le vas conociendo te das cuenta de que lo que dice lo dice convencido, y lo dice porque se lo cree y eso es lo que le hace el jugadorazo que es. El potencial de Rahm no está en su físico o su técnica, está en que tiene una cabeza privilegiada y esa confianza que tiene en sí mismo le convierte en el número dos o tres del mundo. Jon le va a dar al golf español muchísimas alegrías, seguramente algún major, aún no ha jugado su mejor golf en los majors, pero no me cabe ninguna duda de que llegará a lo más alto.
P: ¿Tiene el fútbol demasiada prisa por volver a la competición?
R: Yo entiendo que cada uno tenemos que defender nuestro negocio, pero lo más importante es la seguridad en el tema de los contagios. La prioridad para mí sería conseguir los famosos tests y llevar el mayor número posible a cabo, y que esa desescalada pueda empezar de una vez por todas. Hay que conseguir los test para los sanitarios y poco a poco que la gente pueda hacérselos también y ver así realmente dónde estamos, que es la gran duda de todos con este Gobierno, que es un desbarajuste continuo el tema de los datos, las muertes, las cifras de los test… yo lamentablemente ya no me creo nada.
P: ¿Se está confundiendo a la población con los datos?
R: Estamos todos desesperados, llevamos casi dos meses en casa y queremos hacer vida normal, si es que la normalidad como la conocíamos va a volver a existir. A mí sobre todo me gustaría tener certidumbre, que nos den unas fechas y no me importa que sean a largo plazo, pero uno ya se pone una meta. Ahora mismo el problema es el no saber. Decía el presidente el martes, que yo no daba crédito. «Vamos a ir como un GPS que no te da buenas coordenadas». Está cojonudo, yo voy a Madrid, pongo el GPS para ir a Teruel y aparezco en Ciudad Real, pues oiga, sea usted un poco más concreto. Son estas cosas que sólo pasan en España y así nos va como nos va.
P: Ha sido muy crítico en redes sociales con la gestión del Gobierno, pidiendo incluso la dimisión de Pedro Sánchez. ¿Cree que se producirá?
R: Este no se va ni con agua caliente, lo tengo clarísimo. Pero me hace gracia, pedían la dimisión de Rajoy y la ministra de Sanidad en su momento cuando el, el caso del ébola, porque fue uno, y montaron en cólera cuando tuvimos que sacrificar al perro Excalibur. Ahora vamos camino de los 30.000 muertos y aquí no dimite absolutamente nadie, es un país de cachondeo. El otro día a Isabel Serra la declaran culpable de haber insultado a la policía y no dimite nadie, Echenique que no paga a su asistenta y ahí está, chupando del frasco. No me cabe la más mínima duda de que Pedro Sánchez no va a dimitir, como no hagan un golpe de efecto en su partido como en su día cuando le echaron por primera vez, cuando el famoso ‘no es no’… A mí lo que me preocupa no es la gestión de la crisis que ha sido tan lamentable que estamos como estamos, a mí lo que verdaderamente me preocupa es el futuro de los próximos dos años en España, la crisis económica que se avecina ahí sí que nos va a afectar a todos, con Covid o sin Covid-19. Estaba claro que este gobierno socialcomunista tarde o temprano iba a arruinar a España, lo que jamás pensamos es que lo iban a conseguir en cuestión de meses.
P: ¿Hasta qué punto influyen Pablo Iglesias y Podemos en las decisiones del Gobierno?
R: Como es lógico a Sánchez le tiene agarradito por los huevos. Le ha dado una vuelta y le está dando la segunda. Pero a Pablo Iglesias se le ve venir de lejos, sabemos lo que es. Es un comunista, chavista, bolchevique… llámalo como quieras, pero se le ve venir hace años, el problema es el presidente que tenemos, que es capaz de decir «yo jamás pactaré con Podemos» y luego «no dormiría tranquilo con Iglesias de vicepresidente» y al día siguiente de las elecciones le está dando la mano y firmando un Gobierno de coalición. El problema es tener un presidente del Gobierno del que no te puedes fiar. Pablo Iglesias sabemos todos lo que va a intentar hacer, va a intentar privatizar, subir impuestos, censurar los medios de comunicación… va a hacer lo que ha hecho el comunismo toda la vida. Pero el problema es Pedro Sánchez, que lo tiene cogidito por los huevos.
P: Ha denunciado la censura del Gobierno…
Es que a mí esas ruedas de prensa que hacían hasta hace poco, filtrando preguntas y con las respuestas preparadas, es que no es propio de una democracia como España. No te hablo ya de que quieren censurar los famosos ‘bulos’ y el otro día el jefe de la Guardia Civil, que no se si es exactamente jefe, diciendo que les habían dado la orden de controlar la crítica al Gobierno. ¿En qué país estamos? La información es fundamental y su obligación, de la prensa libre, es criticar la gestión del Gobierno o de la oposición, pero no censurar. Así empezó Chaves, si empiezas a ver sus entrevistas él era muy amigo de todos los medios, pero mira cómo terminó la cosa. En España la gente tiene miedo a abrir la boca, a pronunciarse, que si te sales de lo políticamente correcto… la gente tiene miedo de que te llamen facha, pero es que hoy en día si no te llaman facha creo que tienes un problema serio.
P: Sus ‘haters’ le han criticado duramente por no vivir y tributar en España, además de llamarle facha. ¿Qué les puede decir?
Es algo que no he entendido nunca. Yo tributo donde me corresponde. Desde que vivo en Estados Unidos tributo en Estados Unidos y no dejo de tributar en España. En España tengo sociedades, hago mi declaración de impuestos, declaro mi IVA, sigo generando rentas en España porque tengo un piso alquilado y pago mis tasas y las cosas que me corresponden. Cuando he jugado en Europa he vivido en España y he pagado en España. Ahora vivo en EEUU y pago obviamente el equivalente al IRPF aquí, yo me he desplazado aquí por trabajo, otra cosa es que lo hubiera hecho para pagar menos impuestos. Yo del 2004 al 2013 he vivido en España y he pagado en España. Ahora tengo la suerte de que en Miami el tipo impositivo gracias a Trump es del 20%, y sé que cuando vuelva a España me tocará pagar lo que me toque. Yo jamás he evadido un impuesto y eso de que porque vivo en Miami soy menos español, qué pasa, ¿ahora no puedo criticar? Mi pasaporte es español, he nacido en España y puedo criticar la clase política o la gestión que se hace en España.
P: La actualidad obliga a preguntarle por su amigo Donald Trump.
Su gestión en lo económico ha sido bastante buena y yo creo que la reelección la tenía asegurada. Desde que empezó la pandemia los datos económicos y de desempleo se han disparado y vete tú a saber. Yo pienso que va a ser reelegido, pero no me mojaría ni puedo votar aquí. Yo si pudiera por supuesto que le votaría. Yo sigo con más detalle la gestión española de la pandemia que la americana, para mi gusto es tan difícil es tan nuevo que todo el mundo va a cometer errores, y yo permito que se cometan, es lógico, pero cuando uno comete un error lo que tiene que hacer es disculparse, como han hecho en otros países. Lo que no puede ser es que nos estén tomando por tontos.
Yo a Trump he tenido la suerte de conocerlo, jugar al golf con él y me cayó estupendamente, en ese momento no se había metido en política. Desde entonces me he mantenido en contacto con él, hemos intercambiado algunas cartas, y a mí es un personaje que me hace toda la gracia, a la prensa la deja totalmente descolocada con sus salidas, sus respuestas… es absolutamente genial. No comparto todo lo que dice, hay muchas cosas que no las comparto, pero como no es un político sale un poco de lo que uno está acostumbrado y a veces hasta se agradece.
P: Dice que cuando uno comete un error tiene que disculparse, ¿se refiere al 8M?
R: La OMS venía avisando desde enero, habíamos visto el ejemplo de Italia que estaban confinados, y el 8M, aparte de la manifestación feminista se produjeron otros acontecimientos, partidos de fútbol, el mitin de VOX… Y volviendo al mitin de VOX, fue un error, se infectaron muchos, pero salió Santiago Abascal y pidieron disculpas. Yo entiendo que uno se puede equivocar y como dice Vox, yo no estoy en el Gobierno, no tengo la información, me la tiene que dar el Gobierno, y si el Gobierno dice que todo está bien pues hacemos el mitin.
Pero cuando eres el Gobierno, dispones de la información, misteriosamente los datos de infectados durante el 7 y el 8 han desaparecido, nadie sabe donde están. Si es que nadie se cree la bola, estábamos siguiendo la agenda de Irene Montero y compañía. Del ‘todos y todas’ de diputados y diputadas, de esa chorrada del tema igualitario, que en España es igualitario desde hace años. De la agenda de la izquierda que nos llevan intentando imponer desde hace años, y ahora que tienen acceso al poder se aprovecharon de ello. Lo que está claro es que si se hubiera adelantado el confinamiento tres o cuatro días la diferencia en cuanto a contagios hubiera sido notable, y no hablo del 8M sólo, hablo de todas las cosas que se hicieron, pero al final es el Gobierno el que tiene los datos, la información y te tienes que fiar hasta cierto punto, aunque visto lo visto yo ya no me fío.
P: ¿Le han tentado desde España para probar en la política?
R: Alguna sugerencia me han hecho y te aseguro que no lo descarto, porque ves la situación y te dan ganas. Estar criticando desde fuera está muy bien, pero llega un momento que dices que de una manera u otra me gustaría formar parte de la oposición e intentar hacer algo desde dentro. Ganas no me faltan, no sé si seré lo políticamente correcto que hace falta para estar en el Congreso de los Diputados y no mandar al carajo a más de uno. Mi sueño ahora mismo sería atender una rueda de prensa de Pedro Sánchez y poder preguntarle, y la primera pregunta sería por qué llega sistemáticamente tarde a las ruedas de prensa. Me parece una falta de respeto a los periodistas, a los españoles… Cuando tiene que ver al Rey llega una hora tarde, ¿pero quién se cree que es? Está jugando con nuestro tiempo, que es oro, y nos tiene en vilo. Y a ver qué responde a mi pregunta, porque como nunca responde a lo que se le pregunta, a ver por dónde sale.
P: ¿Cuándo volveremos a ver a Gonzalo Fernández-Castaño compitiendo en un campo de golf?
Aquí el golf profesional se reanudará en junio, pero en EEUU no tengo categoría para jugar así que igual juego algún clasificatorio los lunes. Y el circuito europeo se está hablando de empezar en agosto. Todavía queda mucho y ojalá la cosa mejore y podamos empezar a replantear la temporada y sobre todo poder organizarnos, porque lo más incómodo como deportista es el no saber, a mí me gusta planear con meses de antelación y esto me tiene un poco en vilo, pero ojalá sea lo antes posible porque ganas no me faltan y aunque tenga ya 40 años estoy con muchas ganas porque creo que todavía puedo estar competitivo.