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En el Fiorentina-Inter de Milán

Desgarrador: las lágrimas de los compañeros de Bove al verle desplomado

Preocupación, lágrimas y un susto tremendo en Florencia

El partido fue suspendido

Así fue su desvanecimiento

Los compañeros de Edoardo Bove lloraron su desvanecimiento pensando como todo el mundo de fútbol que su problema de salud podía haber supuesto un drama. Sin embargo, desde Italia informaron minutos después de que se suspendiera el Fiorentina-Inter de Milán que el jugador podía respirar con autonomía aunque continuara inconsciente. Eso sí, las imágenes que se vieron durante el suspense fueron totalmente desgarradoras.

Desde el portero español David de Gea hasta los futbolistas del equipo contrario y cuerpos técnico, casi todos lloraron el repentino desvanecimiento de Bove con 22 años, muy parecido al que sufrió Erikssen en el primer partido de Dinamarca en la Eurocopa de 2021.

Bove cayó de forma abrupta al terreno de juego mientras se estaba disputando este encuentro de la Serie A, la Primera División italiana. Este desvanecimiento dejó mucha tensión y preocupación entre jugadores, cuerpo técnico y aficionados en el estadio Artemio Frachi de Florencia.

El problema del jugador de la Fiorentina se produjo en el minuto 17. Bove se desvaneció y cayó al césped de repente, recordando escenas dramáticas en otros momentos en el fútbol. Por suerte, el centrocampista habría reconocido la conciencia y respira de forma autónoma en el hospital, donde fue trasladado desde el estadio.

Los jugadores de ambos equipos, Fiorentina e Inter, se colocaron en la zona en la que había caído el jugador formando un círculo para que no se pudiera grabar al futbolista que estaba tirado en el césped. Todos los jugadores del partido mostraron su alarma con imágenes de dolor y sufrimiento por lo que estaban viviendo.

Tras unos minutos de asistencia sanitaria en el estadio, con una ambulancia entrando en el Artemio Franchi, el árbitro del partido declaró la suspensión del partido. Todo ello mientras algunos jugadores lloraban, se echaban las manos a la cabeza y mostraban su preocupación por el estado de salud de Bove, jugador italiano de la Fiorentina.