El Deportivo da un paso de gigante hacia Primera
El Deportivo de la Coruña está más cerca de conseguir el ascenso a la Liga Santander tras imponerse al Mallorca por 2-0 en la ida del playoff de ascenso a Primera División
El Deportivo de la Coruña está más cerca de conseguir el ascenso a la Liga Santander tras imponerse al Mallorca por 2-0 en la ida del playoff de ascenso a Primera División. Los goles de Fede Cartabia y Quique González, en la recta final del encuentro después de que el asistente diera validez al tanto al haber superado la línea de gol, dan ventaja a los gallegos de cara al partido de vuelta el domingo en Son Moix.
El cuadro de José Luis Martí fue superior y lo demostró en el césped desde el primer minuto con un carrusel de ocasiones. El conjunto deportivista, que ocupó la última plaza de la fase de promoción, ha llegado como un tiro a las eliminatorias definitivas y lo está demostrando. Este jueves, ante su público, dio un paso de gigante hacia la máxima división del fútbol español con un partido muy completo y ante un rival menguado al jugar con diez toda la segunda mitad por la expulsión de Marc Pedraza por una grave entrada sobre Bergantiños que tuvo que ser hospitalizado.
El Deportivo tenía clara la estrategia y dieron el primer aviso al cuarto de hora con un derechazo de Carlos Fernández que se fue rozando el palo. Raíllo contestó en el área contraria con un cabezazo potente, pero el dominio era del conjunto gallego. Poco después llegaría el tanto del equipo local. La escuadra y el cartabón de Fede Cartabia fueron el mejor argumento de los coruñeses, sobre todo cuando el jugador argentino se soltó la melena.
Primero con un centro que fue un regalo y no pudo rematar Quique y después con una falta exquisita que sorprendió al bueno de Reina. El zurdazo del argentino se coló por toda la escuadra y dio ventaja a los suyos. Para colmo del Mallorca, todo se torció tan sólo unos minutos después al ver como se quedaban con 10 futbolistas. Al 1-0 se le sumó la entrada salvaje –e involuntaria– de Pedraza a Bergantiños.
El defensor del Dépor tuvo que abandonar el terreno de juego bañado en sangre y Pedraza fue expulsado con roja directa. El cielo de Riazor se nubló para el equipo de Vicente Moreno, cuya actitud pasó a ser únicamente defensiva pese a los cambios de la segunda mitad, con la única intención de salir vivos de Riazor para seguir teniendo opciones en el duelo de vuelta. Budimir pudo haber cambiado el curso del partido, pero su único lanzamiento se fue a las nubes.
Entre tanto, el Deportivo lo había intentado con un remate de Carlos Fernández, algo desviado tras un regalo de Saúl, y siguió embotellando al conjunto balear hasta que Fede Cartabia puso un balón con música al corazón del área. Quique remató y Raíllo intentó sacarla, pero el balón sobrepasó la línea de gol de forma clara y, tras consultar durante un minuto con su asistente, el árbitro terminó dando validez al tanto.
A falta de VAR, el colegiado tuvo que dialogar con su asistente durante un minuto para tomar la decisión. El Mallorca, que se hartó a protestar, no llega a entender por qué el linier levantó el banderín si finalmente concedió gol al Deportivo. El 2-0 deja al Dépor en franca ventaja, pero un triunfo por el mismo resultado este domingo sería suficiente para que los bermellones volviesen a Primera.
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