Cataluña se queda con un solo equipo en Primera 30 años después

El descenso del Espanyol deja a Cataluña con un solo equipo en Primera División, una circunstancia que no se vivía desde la temporada 89/90. Aún queda una oportunidad de remediarlo y está en manos del Girona. El equipo catalán, que perdió la categoría en la pasada temporada, aspira a hacerse al menos con una plaza en el play off de ascenso a Primera y sólo así podría evitar que el Barcelona remara en soledad la próxima campaña.

Fue una noche dramática para el Espanyol. No pudo hacer la gesta de ganar a su eterno rival y con la derrota en el Camp Nou certificó su descenso. El equipo perico es el primero en descender de manera matemática en esta temporada 19/20, una derrota que les deja en Segunda 26 años después. Con ello, ya solo el Barcelona militará en Primera entre los equipos catalanes, aunque el Girona aún podría remediarlo.

El equipo catalán se juega en este último tramo de la temporada su futuro. Por el banquillo del Girona se han sucedido esta campaña en Segunda cuatro entrenadores, el último Francisco Rodríguez, sustituto del recién destituido Martí y éste tendrá que guiar a los suyos en el sueño de regresar a Primera. La plaza de ascenso directo queda bastante lejos, especialmente con la victoria del Huesca ante el Alcorcón, que rompía la imbatibilidad de los alfareros fuera de casa, por lo que la vía más factible para el Girona es el play off. En este momento, ocupan la quinta plaza, por lo que si se mantienen entre los seis primeros tendrán la oportunidad de pelear por el ascenso.

Por tanto, como mucho Cataluña contaría con dos equipos en Primera, lejos de los tres que había desde la temporada 17/18 hasta la pasada con Barcelona, Espanyol y Girona en la máxima categoría. La mayor representación de clubes catalanes en Primera se dio con cuatro equipos, una circunstancia que no se vive desde hace más de 70 años cuando en la temporada 48/49 convivieron en Primera Barça, Espanyol, Sabadell y Nàstic. En cambio, que sólo haya un equipo en Primera, el Barcelona, no se da desde la temporada 89/90, pues la otra ocasión en la que descendió el Espanyol (93/94) regresaba a Primera el Lleida.