Bruguera ‘prohibió’ a Nadal jugar el dobles por su salud
Sergi Bruguera tomó la decisión prudente de contar con Marcel Granollers y Feliciano López para el dobles frente a Rusia, dejando descansar a Rafael Nadal. La jugada, que se explica desde la protección del número uno de España, salió a la perfección y fue entendida por el propio Rafa.
A escasos minutos de alcanzar las doce de la noche del martes en Madrid, Rafael Nadal finalizaba con éxito su compromiso en el alambre ante un Karen Khachanov que podía haber acabado con muchas de las posibilidades de España de seguir con opciones en la Copa Davis. Una vez cumplido el primer reto, Rafa prosiguió su camino hacia el vestuario con una idea clara, la de jugar el dobles, pero una vez allí recibió la inesperada noticia de la alineación final de Marcel Granollers y Feliciano López para el encuentro decisivo.
«Si, estaba preparado al 100%, no hay que mentir. Yo pensaba que iba a jugar el doble. He llegado al vestuario y Sergi tenía otra idea, me la ha explicado, la he entendido perfectamente y a muerte con la idea», aseguraba Nadal en la rueda de prensa posterior al partido. La decisión del capitán parecía arriesgada, pero los horarios de ‘after’ de la competición y la concentración de partidos, en una semana y con alto riesgo de eliminación en todos ellos, la convertían en prudente y lógica.
Nadal es un tesoro preciado para España y Bruguera sabe que necesita de lo mejor de él para seguir avanzando hasta el gran objetivo del equipo español, que no es otro que la victoria. Por ello, el capitán español alineó a Granollers y Feliciano en un principio, y a pesar de que la opción Rafa –junto a Carreño– para el dobles era real y podía entrar hasta 10 minutos antes del comienzo del partido, se decidió seguir con la hoja de ruta confiando en dos jugadores contrastados en el dobles… de manera que Rafa pudiera descansar un poco más.
El propio número uno del mundo desgranó lo que sucede con un tenista cuando acaba su partido a altas horas de la madrugada, como está a riesgo de suceder cada noche en la nueva Copa Davis de Piqué. La adrenalina, acudir al fisio o a la rueda de prensa con los medios de comunicación impiden a un tenista en una competición de este calibre dormir hasta pasadas dos horas después de la finalización del partido. «Si terminas a las 2 es imposible que se vayan a dormir antes de las 4:30 y mañana jugamos. Yo lo aveciné cuando supe el formato», aseguraba Nadal, aún sin saber a la hora a la que acabaría el dobles entre España y Rusia.
Este horario añade gravedad a la situación teniendo en cuenta que España tendría que jugar al día siguiente una eliminatoria con Croacia en la que se juega, ni más ni menos, el pase a los cuartos de final de la Copa Davis. Por ende, sumado el cansancio acumulado de Nadal debido al encuentro y las escasas horas de sueño con las que contaba –jugará alrededor de las 20 horas del miércoles con Coric– podían suponer un desgaste clave para las rondas finales. «He salido de la pista pensando que iba a jugar pero me han convencido –Bruguera– al 100% de por qué no debía jugar», finalizó Rafa, el hombre que debe llevar al título a España de aquí al domingo.
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