Deportes
Tensión en la Casa Rosada

Cargas policiales, peleas, avalanchas y heridos en el velatorio de Maradona

Nervios, tensión, avalanchas y cargas policiales en la entrada de la Casa Rosada, donde hoy se celebra el velatorio de Diego Armando Maradona

Incluso la policía tuvo que guardar el féretro por seguridad tras el asalto a la Casa Rosada

No es un velatorio más. Es el velatorio de Diego Armando Maradona, el mejor futbolista de la historia para muchos y un Dios en Argentina, su país, que desde que se conoció la triste noticia se ha levantado para despedir al más grande como se merece. La Casa Rosada es el escenario del multitudinario adiós al Pelusa, y en sus aledaños se están produciendo los primeros altercados debido a las aglomeraciones.

No son imágenes agradables. Queda claro que Maradona era algo más en su país. Nadie quiere dejar pasar la oportunidad de despedir al ’10’, de ahí los incidentes que se están produciendo y que la Policía está intentando evitar. De hecho, ya se han producido las primeras cargas policiales en la entrada de la Casa Rosada coincidiendo con la presencia de las barras bravas de Boca Juniors, que ya han hecho acto de presencia en el velatorio.

Empujones, golpes, insultos, enfrentamientos con la Policía… No son imágenes dignas de un velatorio, pero la muerte de Maradona va más allá de lo normal y establecido. Los medios argentinos ya hablan de algunos heridos, aunque parece que tras abrir las puertas de la Casa Rosada todo ha empezado a controlarse por fortuna para los asistentes y para la Policía.

Incluso entrada la tarde han llegado a derribar la puerta de la Casa Rosada, por lo que las fuerzas de seguridad han tenido que intervenir lanzando gas lacrimógeno dentro del edificio. Tal medida ha causado un gran revuelo porque alteró aún más a la gente que se encontraba dentro del recinto. Ante esta situación, la Policía se vio obligada a retirar el féretro por seguridad. Minutos después y viendo como estaba la situación, la familia y las fuerzas de seguridad estuvieron obligadas a dar por terminado el velatorio.