Alonso suelta su primer misil contra Honda

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Fernando Alonso remolca su coche en un Gran Premio, una imagen habitual esta temporada.
Francisco Rabadán
  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

La paciencia de Fernando Alonso se colmó en el Gran Premio de Suzuka, en Japón, en la casa de Honda, donde por primera vez dejó a las claras lo que piensa sobre el coche que pilota esta temporada. “Es frustrante que te adelante todo el mundo, así lo entiendo yo. Haces una buena salida y estás delante, pero inmediatamente quedas relegado a tu zona natural. Miro por el retrovisor y veo a mi rival cometer errores constantes en las curvas y luego llega a la recta y me adelanta”, expresó el asturiano, que cuenta con un motor que tiene una potencia inferior a 70 caballos respecto a sus rivales.

El piloto celebraba en este prueba su décimo aniversario como campeón del Mundo de Fórmula 1. Si por algo se ha distinguido Fernando en su década y media en la competición es por decir siempre lo que piensa.

Su primera época en Renault fue, sin duda, una de las más prolíficas a la hora de oír perlas sobre sus rivales, especialmente contra Ferrari y Michael Schumacher. “Siempre hay diferentes interpretaciones del reglamento y Ferrari está al límite. En realidad no, la Fórmula 1 es un cachondeo, no tiene reglamento”, dijo tras una sesión de entrenamientos en el GP de Turquía de 2006.

Un año antes ya se las había tenido tiesas con la escudería italiana. “Ferrari hace trampas porque hace más entrenamientos de los que están permitidos en el convenio”, reflejó en aquellos tiempos en los que el equipo preparaba el último coche competitivo para Schumacher. El siete veces campeón alemán también recibió un duro castigo por parte del español. “Es el piloto más antideportivo de la historia. Es el piloto con más sanciones de la historia de la F1, aunque eso no quita que haya sido el mejor a la hora de pilotar y para mí fue un honor luchar contra él”, apuntó.

En 2007, Alonso recaló en McLaren y vivió un tormento con su relación con la escudería británico, muy volcada en favor del entonces novato Lewis Hamilton. “No hay igualdad en el equipo. Siempre hay un mejor motor, una mejor vuelta para parar, siempre hay algo que nunca está de mi lado”, comentó para cargar posteriormente contra Ron Dennis -su actual jefe-. “Tendría que callarse porque al equipo McLaren le iría mucho mejor así. Muchos de los escándalos los ha provocado él y también fuera de los circuitos. He hablado con antiguos pilotos como Montoya, Kimi o Coulthard y todos me han dicho que encontraron la felicidad después de esto. Por algo será”.

Al año siguiente se marchó a Renault para pasar dos de sus peores temporadas hasta la presente. “Somos el coche más lento de la parrilla. Es merecido que nos quedemos en la Q1 permanentemente”, dijo. Al año siguiente, el jefe de Renault, Eric Boullier, le replicó. “No tenía ambición. Sabía que se iba a ir a Ferrari y no empujó como sabía”.

En Ferrari, se pasó de un amor pasional al instante a una ruptura llena de reproches con el paso de los años. “El día que hable a alguien no le va a gustar”, avisó el español en septiembre de 2014 para dar paso a su despedida en el último GP del año pasado. “Para Ferrari puede ser un año difícil, yo llevo aquí cinco temporadas difíciles. Vine a ganar el campeonato del mundo y me voy sin él y decepcionado. Siempre me prometieron un coche que nunca llegué a tener”, afirmó el español.

Ahora, casi un año después de aquel ‘desahogo’ Fernando vuelve a hablar muy claro de su equipo y deja entreabierta una puerta para el futuro. “Espero volver a ser campeón, si no es en la F1, será en otra categoría”.

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