Curiosidades
Una práctica poco habitual en nuestra sociedad que no entraña ningún riesgo

¿Se puede volver a congelar la comida descongelada?

A todos nos ha pasado. Quién no ha descongelado alguno de los filetes que tu madre te ha mandado desde la mejor carnicería de tu pueblo y después ha acabado comiendo pizza a domicilio. La carne yace en la encimera de la cocina sin haber sido aprovechada de ninguna de las maneras y normalmente acaba en el cubo de la basura ¡Error! No desperdicies comida, simplemente, vuelve a congelarla. La comida descongelada puede volver a congelarse sin que sea perjudicial para el organismo. Te lo contamos.

Una leyenda urbana

Se aconseja mantener la comida descongelada en un sitio frío

De todos es conocida la creencia de que resulta peligroso volver a congelar comida descongelada. Muchos creen que después de descongelar estos alimentos cambian sus nutrientes o lo que es peor, se vuelven nocivos para el organismo. Cabe destacar que esta convicción se enmarca como una mala práctica que no puede demostrarse científicamente. Es decir, una leyenda urbana.

Todo tipo de alimento puede volver al congelador sin que sufra ningún tipo de daño ni sea perjudicial para nuestra salud. Eso sí, para que esto sea posible debe de haberse mantenido en la nevera. Según los datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, si la comida descongelada ha estado más de dos horas fuera de un refrigerador que la mantenga o a una temperatura de más de 30 grados durante una hora, no arriesgues tu integridad porque no se puede comer.

Cómo descongelar correctamente

Para descongelar la comida lo mejor es introducirla en agua fría

El principal fallo por el que nuestra comida se vuelve perjudicial se basa en las malas prácticas para congelar el alimento. Los tecnólogos de los alimentos aconsejan que para descongelar de la mejor forma la carne o el pescado es necesario envolver dichos alimentos en una bolsa de plástico e introducirlos en agua fría. De esta forma los alimentos se descongelan mucho más rápido y pierden muchos menos nutrientes.

Descongelar la comida lentamente en la nevera se enmarca como la práctica más extendida que existe. Un ejercicio equivocado, ya que la pérdida de nutrientes es mayor y la conservación de la comida descongelada es mucho menos evidente. Eso sí, no dudes en usar la nevera para guardar estos alimentos hasta que llegue la hora de comer.