Curiosidades
Especie invasora

Lo vemos en todos los parques, pero es una voraz especie invasora que está alterando la vegetación en España

  • Sofía Narváez
  • Periodista multimedia graduada en la Universidad Francisco de Vitoria, con un Máster en Multiplataforma por la Universidad Loyola. Editora en Lisa News con experiencia en CNN y ABC.

En el mundo animal, nada es lo que parece. Que algo sea pequeño, tierno, o incluso con una carita adorable, no quiere decir que no pueda causar estragos en el ecosistema. Para que una especie sea considerada invasora no hace falta que sea enorme ni que dé miedo; los factores son muy distintos.

Eso es justamente lo que ocurre con la cochinilla común, o el «bicho bola». Este pequeño insecto, que llevamos viendo toda la vida, se ha convertido en un enemigo común en el ecosistema español.

Puede que nunca lo hayas pensado, pero este insecto, al que ya consideramos parte del paisaje, no debería estar aquí. Y, sin embargo, está causando graves problemas, alterando la vegetación y las especies locales, haciendo mucho daño.

Esta es la especie invasora que llevas viendo toda tu vida

El Armadillidium vulgare, más conocido como bicho bola o cochinilla común, es un isópodo terrestre que alcanza entre 10 y 18 mm de longitud. Su apariencia es muy común, tiene un cuerpo ovalado, gris oscuro y con la capacidad de enrollarse en una bola cuando se siente amenazado.

Este es un insecto nocturno y omnívoro, que se alimenta principalmente de materia en descomposición. El bicho bola se encuentra en ambientes húmedos, pero lo sorprendente es cómo ha logrado adaptarse a casi cualquier entorno, desde bosques hasta áreas urbanas. Y a pesar de su tamaño tan pequeño, su presencia está empezando a ser una amenaza para las especies locales y la agricultura.

El impacto ecológico de esta especie invasora

Lo que muy pocos saben es que este insecto está provocando alteraciones importantes en la estructura de la vegetación. La cochinilla compite por recursos y espacio con las especies autóctonas, modificando el ecosistema de bosques, matorrales y hasta huertos.

Pero el problema es que no solo está afectando la biodiversidad, también puede convertirse en una plaga en cultivos de siembra directa.

No obstante, es crucial mencionar que si bien tiene efectos negativos, la cochinilla también tiene un lado positivo, pues ayuda a eliminar metales pesados como plomo y cadmio del suelo, favoreciendo el crecimiento de las plantas.

¿Cómo controlar la expansión de este insecto?

Eliminar por completo a la cochinilla no es una tarea fácil, pero hay formas de controlar su presencia. El primer paso es reducir la humedad en las zonas afectadas, ya que estos insectos se reproducen rápidamente en ambientes húmedos. Se pueden usar deshumidificadores y mejorar la ventilación en las viviendas y jardines.

También es recomendable evitar que haya restos orgánicos cerca de las casas, como tierra vegetal o piedras sueltas, que sirven de refugio para estos insectos.

A nivel práctico, existen métodos caseros para capturarlos. Uno de los más efectivos es el truco de la patata. Sólo tienes que cortar una patata por la mitad, vaciarla un poco y dejar que los bichos se metan dentro.

Otra opción es usar trampas con cerveza o vinagre, que atraen a las cochinillas y las mantienen atrapadas. También hay soluciones naturales como el ajo y el aceite, que pueden ayudar a mantener a estos insectos alejados sin necesidad de productos químicos.

¿Cómo identificar a la cochinilla entre otros insectos?

Aunque a simple vista pueda confundirse con otros isópodos, como Glomeris marginata, el bicho bola tiene algunas características únicas. La más destacada es su habilidad para enrollarse, un comportamiento que le sirve de defensa.

Sin embargo, a diferencia de otras especies, sus antenas son claramente visibles cuando se enrolla. Además, su tamaño es mayor que el de otras especies similares como A. pulchellum o A. pictum, lo que la hace más fácil de reconocer.