Desconéctalos antes de salir: los aparatos electrónicos que podrían provocar un incendio

Cuando hacemos un viaje largo o simplemente vamos a estar fuera de casa durante varios días, solemos preocuparnos de hacer la maleta y organizar nuestras vacaciones. Sin embargo, muchas veces pasamos por alto algo esencial antes de salir: la seguridad del hogar, en especial en lo que respecta a los aparatos electrónicos y electrodomésticos que dejamos conectados. Y es que, el hecho de dejar enchufados ciertos aparatos representa un riesgo significativo para la seguridad.

Con el paso del tiempo, la tecnología ha avanzado y muchos de los dispositivos que tenemos en casa son cada vez más eficientes, pero esto no significa que debamos bajar la guardia. El hecho de no desconectar algunos electrodomésticos o aparatos electrónicos cuando puede tener graves consecuencias, como cortocircuitos, sobrecalentamiento, e incluso incendios. De acuerdo con expertos en seguridad doméstica, la mayoría de las personas subestiman los riesgos que estos aparatos pueden representar cuando permanecen enchufados sin supervisión.

Los aparatos electrónicos que debes desconectar

Los pequeños electrodomésticos de cocina, como freidoras o cafeteras, aunque a menudo se consideran inofensivos, en realidad son muy peligrosos. Aunque los electrodomésticos modernos están diseñados para ser más seguros, la acumulación de grasa, suciedad y restos de comida puede generar problemas con el tiempo. Esta suciedad puede afectar los componentes internos y generar cortocircuitos, lo que aumenta la probabilidad de que ocurra un incendio.

El riesgo no sólo está relacionado con el mal funcionamiento de los aparatos. En la cocina, las altas temperaturas, el calor residual y la humedad pueden hacer que estos pequeños electrodoméstico sean más vulnerables a los accidentes. Un simple olvido al apagar una tostadora o una freidora puede provocar un sobrecalentamiento del aparato.

Por otro lado, tampoco hay que pasar por alto los cargadores de dispositivos electrónicos como teléfonos móviles, portátiles, tablets, e incluso cepillos de dientes eléctricos, ya que representan un riesgo importante si se dejan enchufados sin necesidad. Cabe señalar que los cargadores siguen consumiendo electricidad incluso si no están en uso, lo que contribuye al derroche de energía. Además, a medida que envejecen o se dañan, su capacidad de gestión de la electricidad disminuye, lo que aumenta el riesgo de que puedan causar un corto circuito.

Electrodomésticos grandes

Cuando hablamos de electrodomésticos grandes, como hornos, lavadoras, secadoras o lavavajillas, las recomendaciones de seguridad son algo diferentes. Si bien estos aparatos no representan un riesgo tan inmediato como los pequeños electrodomésticos de cocina o los cargadores, es importante desenchufarlos cuando vamos a estar fuera de casa por varios días.

Por otro lado, las lavadoras y secadoras también pueden ser peligrosas si no se desconectan, sobre todo si se producen fallos en el sistema eléctrico. Sin embargo, en el caso de electrodomésticos como la nevera o el congelador, lo mejor es dejarlos enchufados si están en funcionamiento, ya que desconectarlos podría comprometer la conservación de los alimentos.

Vivienda unifamiliar

Si vives en una casa unifamiliar, las recomendaciones para desconectar los electrodomésticos y aparatos electrónicos pueden variar dependiendo de las necesidades de tu hogar. Por ejemplo, si quieres cortar el suministro eléctrico desde el cuadro de mando, asegúrate de que esto no afecte a los aparatos que necesitan estar en funcionamiento, como la nevera, el congelador o el sistema de calefacción.

Es recomendable que, cuando te vayas de vacaciones, un familiar o amigo cercano visite la casa ocasionalmente para comprobar que no haya problemas con la electricidad o con los electrodomésticos. Esto puede ser crucial para evitar que se presenten fallos o accidentes que puedan pasar desapercibidos por mucho tiempo.

Medidas preventivas

Existen varias medidas preventivas que podemos tomar para reducir el riesgo de incendios en el hogar. La primera de ellas es asegurarse de que todos los electrodomésticos y dispositivos estén apagados cuando no están en uso. Además, es importante realizar un mantenimiento regular de los aparatos, limpiándolos de residuos, grasa y suciedad que se puedan acumular con el tiempo.

Si tienes la costumbre de dejar aparatos electrónicos en espera, como televisores, consolas de videojuegos o equipos de música, es recomendable desconectarlos completamente. Los enchufes inteligentes o los interruptores de apagado automático on una excelente opción para evitar despistes y que todo quede apagado.

Aunque pueda parecer una molestia, desconectar ciertos electrodomésticos y aparatos electrónicos antes de salir de casa es una de las mejores maneras de reducir el riesgo de incendios y accidentes eléctricos, tal y como alertan los expertos. Adoptar esta práctica no solo protege tu hogar y tus seres queridos, sino que también ayuda a reducir el consumo de energía y, en consecuencia, tus facturas de electricidad.

Además, mantener los electrodomésticos y dispositivos electrónicos en buen estado y correctamente desconectados puede alargar su vida útil y evitar gastos imprevistos. Por lo tanto, antes de salir de casa, dedica unos minutos a asegurarte de que todo está apagado y desconectado de forma segura.