Cataluña

Colau condena la violencia de los radicales pro-Hasél que intentaron quemar a policías de Barcelona

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha colgado un mensaje en su cuenta personal de Twitter para condenar los actos violentos vividos en la noche de este sábado en la Ciudad Condal, durante los cuales varios radicales atacaron y prendieron fuego a un furgón de la Guardia Urbana con agentes en su interior.

La regidora ha colago un mensaje en el que asegura que «el derecho a la protesta es totalmetnte legítimo. La violencia y el vandalismo, no. Mi condena rotunda a los actos violentos de hoy en Barcelona después de una manifestación pacífica. Mi apoyo a la Guardia Urbana de Barcelona y a los agentes de la comisaría de Ramblas, vecinos y comerciantes afectados por los alborotos».

Durante la noche de este sábado se vivió una nueva jornada de disturbios y violencia en el centro de Barcelona como colofón a una jornada de protestas que, en un principio, había discurrido con tranquilidad y sin incidentes. Fue al llegar a la zona del Raval cuando comenzó la violencia, que alcanzó su punto álgido con el ataque a un furgón policial que protegía una comisaría.

Los violentos radicales comenzaron a lanzar cócteles molotov a los agentes de la Guardia Urbana logrando prender fuego a un vehículo policial, con agentes en su interior, unos hechos que pusieron sus vidas en juego. Afortunadamente, estos pudieron salir del vehículo en llamas por sus propios medios.

En esa misma zona, de la misma forma que hace unos días, también han atacado un concesionario de Volskwagen destrozando el escaparate y algunos vehículos que estaban expuestos. Los radicales también han saqueado varios establecimientos de ropa como la principal tienda de Zara en Barcelona, situada en Plaza Cataluña, o el Decathlon de la calle Canuda, a tocar de Las Ramblas.

Han sido unas marchas casi dos semanas después de la detención y encarcelamiento del delincuente Pablo Hasél el pasado martes, después de encerrarse en la Universidad de Lérida para retar a las autoridades. El aumento de la tensión por parte de los protestantes ha obligado a los Mossos a reforzar su presencia y su actuación durante la parte final de la protesta. Aunque siguiendo las directrices de las últimas semanas se han situado por detrás de los manifestantes durante gran parte de la tarde, ya a última hora, con la explosión de los actos más violentos, los antidisturbios han intentado disuadir a los participantes con los furgones acelerando por encima la acera de espacios como Las Ramblas.

Ya entrada la noche, varios agentes de paisano comenzaban a identificar y detener a algunos de estos radicales, hasta diez según información de los Mossos, que habían participado activamente durante los disturbios y destrozos en esta nueva jornada de ataques en el corazón de la Ciudad Condal.