El postparto y la crisis de pareja

Tener un hijo dicen que es lo más hermoso que le puede pasar a alguien en la vida, pero antes de animarse a ser madre hay que tener claro que eso trae consigo también un postparto muy difícil y duro. Y no nos referimos sólo al hecho de aprender a cuidar al bebé o de sobreponerse a las consecuencias físicas del alumbramiento sino también de afrontar la crisis de la pareja.

Nadie parece querer hablar de que toda relación atraviesa uno de sus momentos más duros después de tener un bebé, se muestra casi como un tabú, pero no hacer referencia a la misma no significa que deje de existir.

Hay que afrontar los problemas de frente y por eso se debe ser consciente de que en el postparto las parejas sufren, se tambalean, se resquebrajan y, en algunos casos, se rompen para siempre. Por eso, si tú pronto vas a dar a luz, es el momento de que tomes conciencia del riesgo que corres con respecto a tu relación, para así saber actuar. ¿Cómo hacerlo? Descubriendo las dificultades y obstáculos que tendréis, tú y tu chico o chica, y las herramientas que debéis usar para conseguir no acabar divorciados:

Llegan los problemas

El nacimiento de un bebé es una noticia feliz que a los padres llena de ilusión y que les hace querer afrontar una nueva vida con la mayor alegría. Pero la realidad no es idílica. Cuidar a un niño, especialmente en las primeras semanas desde su nacimiento, supone tener que adaptarse a sus horarios de sueño y comida, descansar muy poco, estar llenos de dudas sobre cómo bañarle o vestirle, tener que hacerle frente a muchos gastos, recibir la continua presencia de visitas en casa…

Y todo eso se traduce en los siguientes conflictos entre la pareja:

• Discusiones por cómo alimentar, cambiar el pañal o lavar al bebé.

• Riñas por los continuos cambios de humor de la madre, fruto de la revolución hormonal que ha sufrido su cuerpo.

• Enfados porque los dos adultos no colaboran igual en el cuidado del pequeño o en las labores del hogar.

• Falta de relaciones sexuales, bien por la conocida cuarentena o porque el cansancio deja la libido por los suelos.

• Escasos momentos para compartir en pareja, por las necesidades del niño o por la constante presencia de familiares y amigos en casa.

¿Qué hacer para no romper la relación?

Todo ese conjunto de situaciones provocan que los padres afronten a nivel de pareja una de las crisis más graves que han tenido hasta ese momento. Por eso, lo que debe hacer, si desea seguir junta, es poner de su parte y llevar a cabo una serie de acciones que ayudarán a que el amor prime y sea el que la mantenga unida y feliz junto a su hijo:

• Paciencia. Esta es, sin lugar a dudas, la principal “arma” que tiene cualquier relación para conseguir no divorciarse por culpa del postparto, ya que es la clave para entender que tanto a una parte como a la otra le cuesta adaptarse a la nueva vida. Así, lo que hay que hacer es respirar y contar hasta mil cuando la pareja no esté vistiendo bien al bebé, cuando ha dado una mala contestación fruto del cansancio…

• Comunicación. Ni que decir tiene que tanto en este momento como en cualquier otro de la relación es básico hablar las cosas, expresar lo que se siente, manifestar lo que se necesita…Concretamente tras el nacimiento del bebé es fundamental que la pareja encuentre momentos para poder hablar cara a cara y conversar acerca de sus vidas en ese instante, así podrán desarrollar la empatía necesaria para apoyarse y amarse en lugar de gritarse y odiarse.

• Demostrar el cariño. La mujer cuando acaba de dar a luz está sometida a una serie de cambios físicos y hormonales que provocan que no se encuentre bien de ánimo, estando incluso la posibilidad de que sufra una depresión postparto. Por eso, lo que necesita es sentirse respetada, apoyada y amada, y ¿qué mejor que su pareja para hacerlo? No obstante, no hay que olvidarse de que la recién estrenada mamá también debe hacer lo mismo con su chico o chica, que, de igual modo, necesitará saber que sigue siendo especial y no “segundo plato”.

• Intimidad. Por supuesto, ni que decir tiene que el sexo también es fundamental para sostener una relación. De ahí que se deban buscar momentos para disfrutar como antes de las relaciones íntimas. Eso sí, hay que tener paciencia porque la mujer no sólo acaba de tener un parto sino que además puede sentirse con baja autoestima si aún sigue teniendo unos kilos de más. No obstante, con amor, y comprensión se recuperará la pasión.

¿Has tomado nota de todo lo que deberás hacer para conseguir salvar tu relación después del nacimiento de tu bebé?