Bebés

La lactancia materna, a través del arte

En estos momentos, y desde hace varios meses, ha surgido una agria polémica en torno a la lactancia materna. Concretamente, han tenido lugar debates acalorados y acciones tensas entre mujeres dando el pecho a sus bebés en lugares públicos, como el metro o un parque, y quienes se sienten “molestos” por tener que contemplar esa escena. Y es que estos últimos consideran que la mujer tenga un pecho fuera puede resultar incómodo, lascivo u obsceno.

El resultado de esa confrontación ha sido que se pongan en marcha distintas campañas en pro del amamantamiento y también que hayan surgido pequeñas propuestas que lo defienden, respaldan e impulsan. Buena muestra de esto último es la cuenta que se ha abierto en la red social Instagram bajo el nombre “breastfeedingart”, que viene a reflejar cómo la historia del arte está llena de obras de gran valor donde se le da absoluta naturalidad, la que tiene, a la lactancia.

La autoría

La artista y madre Leigh Pennebaker, que tiene tres hijos, fue la que tomó la decisión de mostrar su apoyo al acto de dar el pecho a los bebés. Y por eso no dudó en poner en marcha la medida de abrir la citada cuenta, que ya cuenta con más de 40.000 seguidores, quienes pueden disfrutar de un sinfín de obras artísticas (pinturas, esculturas, fotografías, dibujos…) en las que se muestra lo hermoso de ese instante que viene a fortalecer el vínculo afectivo entre madre e hijo.

“Porque la lactancia ha sido normal desde siempre”. Este es el lema que presenta dicho espacio web que hasta el momento ha realizado más de 900 publicaciones, todas consiguiendo un gran éxito.

Las obras

Como hemos mencionado, son numerosas las obras artísticas que se utilizan en ese perfil para reivindicar la lactancia. No obstante, entre las más significativas o entre las que han conseguido llegarnos más al corazón o despertar nuestros sentidos se encuentran la siguientes:

Virgen con el niño

Aunque parece que la lactancia es algo muy “de moda”, indiscutiblemente siempre ha estado presente de manera indisoluble en la vida del ser humano. De ahí que desde hace siglos se plasmara a través del arte. Y buena muestra de eso es esta pintura del siglo XIV, concretamente del año 1370 que fue realizada por el pintor italiano del gótico tardío Paolo di Giovanni Fei (1345 – 1411).

Esta obra es quizás la más significativa de todas cuantas realizó, en la actualidad se encuentra expuesta en el Museo Metropolitano de Nueva York y nos muestra a la Virgen acunando en brazos a su hijo mientras lo alimenta de su pecho.

Madre e hijo en la orilla del mar

Uno de los grandes pintores de la historia del arte es, sin lugar a dudas, el malagueño Pablo Picasso (1881 – 1973), creador del cubismo junto a Georges Braque. Aunque quizás sea desconocido por muchos, este autor realizó un sinfín de cuadros basándose en la relación madre e hijo, especialmente en la intimidad de ese momento de dar el pecho.

Así, nos legó varias pinturas que reflejan, con emotividad y puro sentimiento, ese instante y buena muestra de eso es esta obra del año 1901, en la que se representa a una mujer amamantando a su bebé a orillas del mar.

Silencio

La atención, cuidados y cariño de una madre a todos y cada uno de sus hijos es lo que se muestra en este cuadro del siglo XVIII, concretamente de 1759, que fue realizado por el francés Jean Baptiste Greuze (1725 – 1805). Una figura artística insigne de su país en aquel momento y cuyo legado se encuentra actualmente repartido entre los museos Louvre (París), Fabre (Montpellier) y Tournus.

En esta pintura se nos enseña a una mujer junto a sus tres vástagos, a los que presta la consabida atención: al mayor le escucha mientras muestra sus cualidades musicales, al menor le acaricia la mano mientras duerme y al pequeño le da el pecho.

Madre e hijo

El escultor alemán Wilhelm Lehmbruck (1881 – 1919), cuya carrera giró fundamentalmente en torno al cuerpo humano, nos presenta esta escultura tan hermosa como clarificadora de la belleza que entraña el momento del amamantamiento y del vínculo tan especial que crea entre la mujer y su bebé. Una obra que data del año 1907 y que ha sido calificada como puro amor.

Estas son sólo tres de las propuestas que ha utilizado Leigh Pennebaker para darnos a conocer que la lactancia tiene que verse como algo natural, carente de todo tipo de obscenidad y como una unión imposible de criticar entre madre e hijo. No obstante, la lista de vídeos, fotografías, dibujos, esculturas y pinturas que ha subido a la Red es amplísima. Échale un vistazo, seguro que te sorprenderá y encantará a partes iguales.