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Actividades Montessori

Actividades Montessori para promover la autonomía de los niños en casa

La autonomía de los niños se puede desarollar con varias actividades en el hogar, como decantar líquidos, recoger hojas en el jardín o hacer sonar vasos con líquido.

A partir del método pedagógico Montessori, podemos aprovechar los días en casa para conseguir que los niños más pequeños logren ser cada vez más autónomos y de este modo comprobar como va progresando su desarrollo psicomotor. Conozcamos ahora algunas de las actividades Montessori que podemos aplicar para promover la autonomía de los niños en casa.

El método Montessori propone actividades y juegos de modo que los niños en etapa preescolar e infantil, puedan aprender a medida que juegan y se divierten. En anteriores artículos ya vimos como en estos días pandemia, podemos aprovechar el confinamiento vigente en las casas, para por ejemplo hacer juegos para que los niños jueguen con su voz, pero también podemos recurrir a aquellos que les permitirán promover su autonomía de movimientos por el hogar.

Actividades Montessori para promover la autonomía de los niños en casa

Cuando hablamos de autonomía en los niños, nos estamos refiriendo a todas esas acciones que los niños pueden hacer por sí solos, ya sea por ejemplo coger las cosas, manipularlas, atarse también los cordones, o comer solo y sin mancharse. Veamos entonces algunas actividades cotidianas del hogar que a partir del método Montessori nos va a permitir ayudar a los niños a ser cada vez más autónomos.

  1. En la cocina se puede «hacer pizza» (a partir de 7 años): la actividad tiene como objetivo promover la autonomía y la ejecución de un procedimiento completo y educar a los niños en la socialidad y la responsabilidad en el sector alimentario. Para ello debemos seguir todas las etapas con el niños, es decir, primero de todo escribir la receta con todos los pasos, hacer que el niño use el delantal, organizar los ingredientes y todo lo que necesita sobre la mesa, y dejar que el niño siga la receta de forma independiente.
  2. En el baño pueden hacer «decantación simple con agua» (a partir de 18 meses): La actividad tiene como objetivo fomentar la exploración de un material a través del descubrimiento de su potencial y características, para favorecer la concentración y refinar la coordinación manual-ocular. Entre las etapas de esta actividad, tenemos que colocar una toalla en el baño, colocamos luego dos cuencos encima y agregar agua en uno de las dos; ahora coloca un cucharón, un vaso y un tazón junto al recipiente lleno de agua; deja que el niño juegue y experimente libremente.
  3. En el jardín, sin embargo, se pueden «recoger las hojas» (a partir de 30 meses): la actividad tiene como objetivo fomentar la coordinación entre las extremidades inferiores y superiores, la concentración y la ejecución de una tarea compleja, sentando las bases de la educación ambiental. Para ello, bastará colocar una canasta (o un balde) en un lugar del jardín; con el rastrillo acercamos las hojas a un punto de recolección; levantamos las hojas con el niño con las dos manos; y colocamos en el recipiente.
  4. En la sala de estar puedes hacer «escalas de sonido» (a partir de dos años): la actividad tiene como objetivo refinar el sentido del oído. Entre los pasos para esta actividad podemos hacer lo siguiente:llenar una jarra con agua;usar colorante alimentario para teñir el agua de la jarra; colocar la jarra y algunos vasos (4 o 5) en una bandeja; echar el agua en los vasos colocando en cada uno una cantidad diferente de líquido; con la cuchara, tocar los vasos para que podamos tocar una «escala» (desde el vaso menos lleno hasta el más lleno) y produce diferentes melodías.