El Ayuntamiento de Palma tendrá patas arriba desde julio y hasta final de año el Parc de la Mar

El Ayuntamiento de Palma tendrá patas arriba desde julio y hasta final de año, el Parc de la Mar tras adjudicar hoy la Junta de Gobierno a la empresa Melchor Mascaró, las obras de mejora y renovación del pavimento del principal punto de entrada de turistas y cruceristas al centro histórico por un importe de 844.403 euros.

Estas obras, que se iniciarán en el mes de julio, tendrán una duración aproximada de unos ocho meses y, en principio, optan a ser financiadas con el Impuesto de Turismo Sostenible (ecotasa) del Govern. Pese a las quejas de los comerciantes por el alud de obras en plena temporada, el gobierno municipal no se plantea su retraso y, en rueda de prensa, la concejala socialista de Infraestructuras, Angélica Pastor, afirmó que «son unas obras que se hacen en beneficio de toda la ciudadanía, que contribuirán a que el Parc de la Mar sea un lugar más accesible y más seguro para los peatones».

Tras dos años de pandemia desaprovechados para ejecutarlas, la intervención se ha planificado en dos fases, y en esta primera, a desarrollar a lo largo de la presente temporada turística, se arreglarán elementos simbólicos del parque como la acera del lago, las barandillas que están deterioradas y el mobiliario urbano.

«Nuestra intención es que a finales de año el 90% de la obra esté terminada», aseguró Pastor respecto a un proyecto que ha pasado por la evaluación de la comisión de centro histórico, y que ha contado con la colaboración de los arquitectos que hicieron el diseño de este espacio de primera línea como son Pere Nicolau y Angel Morado, autores del primer diseño.

Las obras que se iniciarán se ejecutarán en el espacio del parque comprendido entre la rampa de bajada, situada en las gradas cercanas a Antoni Maura y toda la explanada situada frente al local comercial, el aparcamiento y la rampa de subida al puente.

El Parc la Mar se construyó en 1984 con materiales tradicionales como el marés, elemento que ha sufrido un importante desgaste y, debido a su complicada reparación, genera un peligro peatonal que ahora se eliminará por completo. El material se sustituirá con una baldosa prefabricada que se producirá expresamente para este espacio, y que armonizará cromáticamente con el conjunto histórico de la muralla, la Seu y Almudaina a los que el parque da acceso.

Así, se dotará a este espacio de un pavimento de una tonalidad neutra similar al marés pero con la resistencia adecuada para eventos que tienen lugar en la actualidad.