OkBaleares

El Ayuntamiento de Palma ha eliminado casi 4.000 pintadas vandálicas desde el comienzo de la legislatura  

El Ayuntamiento de Palma ha retirado cerca de 4.000 pintadas vandálicas en edificios municipales y localizaciones emblemáticas de la ciudad desde el principio de la legislatura, lo que supone un 65% más de las que se retiraban en años anteriores.

Estas cifras corresponden a varias líneas de actuación que son complementarias entre sí, como son el trabajo diario tanto de EMAYA como del área de Infraestructuras, las acciones incluidas en el plan de choque de limpieza y mejora de los barrios, Palma a Punt, los trabajos en inmuebles privados a instancias de las comunidades de vecinos y, finalmente, las actuaciones especiales en ubicaciones emblemáticas del municipio.

En lo que se refiere al Palma a Punt, que recorre los 89 barrios de Palma de manera escalonada reforzando los servicios diarios, cabe destacar que se han retirado unas 2.000 pintadas de edificios municipales y del mobiliario urbano durante la primera fase, que se realizó entre septiembre y diciembre del año pasado, y la primera parte de la segunda fase, donde se ha trabajado entre el 4 de marzo y el 15 de abril de este ejercicio.

Quitar una pintada monocromática cuesta 55 euros/m2

También, en relación con esta problemática, desde el Consistorio se ha potenciado la eliminación de pintadas en las comunidades de vecinos. El Ayuntamiento no tiene competencias para intervenir en inmuebles privados y es por eso que, a través de la empresa municipal, se ofrece un servicio de limpieza a petición de los propietarios con un precio bonificado de 2 euros el metro cuadrado. El balance de esta línea, según apuntan desde EMAYA, es bastante positivo, ya que en los últimos cuatro meses se ha actuado en 92 fachadas a instancias de las comunidades.

A estas cifras hay que añadir más de 1.000 pintadas retiradas en actuaciones extraordinarias realizadas en lugares emblemáticos y puntos negros de la ciudad como son la Plaza del Olivar, Costa de Sant Domingo, Mercado de Pere Garau, Calle Sindicato o la Plaza del Tubo.

«Pintada realizada, pintada retirada»

En este sentido, cabe denunciar que en alguna de estas ubicaciones los incívicos han vuelto a actuar después de su limpieza integral. Sin embargo, desde las áreas municipales competentes se ha actuado retirando los nuevos grafitis en un plazo de 48 horas, cumpliendo con la política del equipo de gobierno de «pintada realizada, pintada retirada» puesta en marcha para combatir el vandalismo en el casco urbano.

El teniente de alcalde de Medio Ambiente y presidente de EMAYA, Llorenç Bauzá, ha señalado que el objetivo «es ser más constante que los incívicos y retirar el mayor número de pintadas en el menor tiempo posible. Queremos vivir en una ciudad de la que poder sentirse orgulloso».

4.000 pintadas vandálicas eliminadas en edificios municipales

Para conseguirlo, el Ayuntamiento ha redactado una nueva ordenanza cívica que entrará en vigor en los próximos meses e incluye un endurecimiento de las sanciones relacionadas con los ataques al patrimonio.

La finalidad es que la realización de pintadas vandálicas sea considerada una falta muy grave que conlleve una multa de 3.000 euros en lugar de la falta leve y sanción de 300 euros que se aplicaba hasta ahora. Además, si la pintada se realiza sobre un edificio catalogado o protegido, la incidencia se trasladará y se tramitará a través de la vía penal.

Bauzá, asimismo, destaca la coordinación entre las diferentes áreas municipales para llevar a cabo esta tarea y la colaboración con otras administraciones, como la abierta con el Consell de Mallorca, «para agilizar los trámites administrativos y los permisos necesarios para poder actuar en espacios catalogados, ya que hasta ahora este proceso era lento».

Se calcula que quitar una pintada monocromática tiene un coste, aproximado, de 55 euros por cada metro cuadrado, mientras que retirar una de varios colores tiene un coste de unos 83 euros por metro cuadrado.

*Contenido patrocinado por el Ayuntamiento de Palma