El Ayuntamiento de Palma aprueba la zona de bajas emisiones con la abstención del PSIB

El Pleno del Ayuntamiento de Palma ha dado luz verde a la zona de bajas emisiones (ZBE) gracias a los votos a favor del PP, la abstención del PSIB y el rechazo de Vox, Més y Unidas Podemos.

El concejal de Movilidad, Antoni Deudero, ha comenzado el debate para la aprobación provisional de esta ordenanza que regulará el tráfico en el centro de la ciudad, con una «llamada a la reflexión» a todas las fuerzas políticas presentes en el Consistorio para que apoyaran una iniciativa que «reproducía los trabajos de la anterior legislatura».

Otro de los argumentos que ha esgrimido Deudero es «continuidad» y «consolidación» de los proyectos aprobados por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible para la implantación de las ZBE y que le reportaron 20 millones de euros en inversiones al Ayuntamiento de Palma. «El escenario de no tener aprobada la ordenanza complica enormemente la situación, no de este equipo de gobierno, sino del Consistorio», ha apuntado.

Además, Deudero ha señalado que se trata de una herramienta que es «necesaria» para continuar la lucha contra el cambio climático y la mejora de la calidad del aire en la zona.

La primera en intervenir para avanzar su voto contrario ha sido la regidora de Unidas Podemos, Lucía Muñoz, quien ha explicado que esta «no era la propuesta» del conjunto de los grupos políticos que integraban Cort en la anterior etapa, sino «la propuesta del PSIB», partido que estaba al frente del área de Movilidad.

La representante municipal ha alegado que esta ordenanza de ZBE es la de una zona de «iguales emisiones», puesto que las restricciones a la circulación se circunscriben al centro de Palma y son «las mismas que rigen en la actualidad la zona Acire».

Por su parte, el regidor de Més per Palma Miquel Àngel Contreras ha recriminado al PP tener un modelo de movilidad y de ciudad en el que impera la «dictadura del coche» para los que «pueden permitirse el lujo de contaminar por encima de la salud y el bienestar de la ciudadanía».

Contreras ha criticado que el Consistorio apruebe la ZBE por «trámite» y porque les «obliga la ley», lo que demuestra que el PP «no quiere reducir las emisiones», para lo que ha puesto el ejemplo del anuncio de esta semana de la construcción de 26 nuevos parkings hasta 2035.

Vox: «Es una empresa con falta de experiencia»

La regidora de Vox Gari Durán se ha encargado de defender la postura de su partido sobre la ZBE, al reprochar que el proyecto lo desarrollara finalmente una empresa con «falta de experiencia», que obtuvo una puntuación de siete sobre 40 puntos en la valoración técnica.

Durán ha alegado que con la implantación de esta ZBE habrá un «aumento del tráfico» en las zonas periféricas y de la contaminación cuando busquen aparcamientos, recoge la agencia Europa Press.

También ha señalado la falta de mediciones de la contaminación acústica y las supuesta pérdidas económicas que generarían las restricciones al tráfico en los comercios y establecimientos de la zona afectada.

Acto seguido ha tomado la palabra el regidor del PSIB Xisco Dalmau, quien ha advertido que la incertidumbre que pesaba, en ese momento, sobre la aprobación de la ZBE muestra la «incapacidad notable y supina» del PP para escuchar y permitir la participación ciudadana en la normativa.

«Este es un gobierno negacionista arrastrado por su socio de ultraderecha que, una vez más, demuestra con sus afirmaciones su terraplanismo de manual contra la evidencia científica», ha mantenido.

Asimismo, ha pedido el cese de Deudero por «extralimitarse» para tratar de «modificar el reglamento de la ZBE» que, desde su punto de vista, fue el «causante» de la dimisión de los técnicos municipales que se encargaban de su elaboración.

No obstante, ha subrayado que como «muestra de responsabilidad» el PSIB se abstendría para que el Ayuntamiento pueda tramitar la ordenanza y dar cumplimiento a la Ley Contra el Cambio Climático pero ha recalcado que la ordenanza es un documento que «se debe mejorar» porque «debe incluir medidas complementarias».