Andalucía

La ‘díscola’ Rocío Ruiz preocupa a Cs: Arrimadas pondrá orden en Andalucía

La polémica está servida en el seno de Ciudadanos (Cs) Andalucía. El enfrentamiento entre dos pesos pesados de la Junta y del partido, Juan Marín, vicepresidente andaluz y líder del partido, y Rocío Ruiz, consejera de Igualdad y una de las caras más visibles del partido en la comunidad, preocupa mucho en Madrid, desde donde Inés Arrimadas está decidida a tomar cartas en el asunto, según aclaran fuentes del partido.

El partido ve con preocupación el creciente enfrentamiento entre las facciones que lideran Rocío Ruiz y Juan Marin. Un enfrentamiento constante, que se visibiliza tanto en público como en privado, que se ha llevado incluso al interior del grupo parlamentario, donde más de la mitad del mismo defiende, por ejemplo, la salida del portavoz Sergio Romero, al que acusan de posicionarse en uno de los bandos y de no gestionar el día a día como requiere su cometido, según ha podido saber OKDIARIO por fuentes del partido a nivel nacional.

En este sentido, adquieren peso dos figuras importantes en Cs Andalucía: los portavoces adjuntos Fran Carrillo Guerrero y Mónica Moreno, ambos miembros del comité autonómico y figuras respetadas y reconocidas por afiliados y compañeros del partido en la comunidad.

Carrillo y Moreno, de este modo, están llamados a tener un protagonismo en el futuro importante. La dirección apuesta por un cambio en las formas y en el fondo a la hora de llevar el partido en la región, que sigue las directrices marcadas por la Ejecutiva Nacional.

Fran Carrillo Guerrero, como coordinador principal de Córdoba y Mónica Moreno, como responsable de acción institucional autonómica, están bien considerados en la planta noble de Alcalá 253, tal y como explican fuentes de la Ejecutiva.

Y es que esta sensación de que el partido necesita un cambio en Andalucía no es exclusivo de la dirección. Tal y como ha señalado un diputado nacional consultado por OKDIARIO, “Ciudadanos tiene que renovarse en caras y formas, en el conjunto de España y por supuesto también en Andalucía. Necesita perfiles que sean capaces de llegar a un sector de votantes amplio, tanto de centro derecha como centro izquierda”.

Polémica

La última -y más gorda- polémica suscitada entre Ruiz y Marín se ha producido este mismo miércoles, cuando la consejera de Igualdad sorprendía al gobierno andaluz y al partido al que pertenece afirmando que su intención pasaba por cubrir los puestos territoriales de la Junta con gente de Ciudadanos, en vez de funcionarios. El objetivo, dijo, pasaba por «comunicar lo que está haciendo Ciudadanos en esta consejería y que llegue a todos los sitios». Unas palabras, que no han sentado bien en San Telmo… y tampoco a Juan Marín.

Y es que uno de los principales objetivos de la denominada Junta del cambio pasa, precisamente, por poner fin a los enchufismos que durante 37 años eran el pan nuestro de cada día en la comunidad. Por eso, unas declaraciones en las que se desliza que será el partido de Inés Arrimadas quien colocará a estas personas dentro del Gobierno andaluz choca frontalmente contra el mensaje que desde hace dos años se da desde la Junta de Andalucía.

El propio Juan Marín ha renegado este jueves de la afirmación de la consejera por ir «en la dirección contraria de lo que ha defendido siempre» Cs, un partido que ha demostrado haber «apostado siempre por la valía, capacidad y talento de las personas a la hora de asumir una responsabilidad en el ámbito público».

Además, «es claro y evidente, y así lo recogen nuestros propios Estatutos, que creemos que los funcionarios públicos tienen una labor importantísima en el ámbito de la administración, y no hay que tener el carné de militante de Cs para asumir una responsabilidad en un gobierno de Ciudadanos», según ha añadido Marín.

El vicepresidente ha explicado que ha podido oír las declaraciones de la consejera de Igualdad, y «va en la dirección contraria de lo que Cs ha defendido siempre», acerca de que «no hace falta ser militante o afiliado de Ciudadanos para tener un cargo de responsabilidad».