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Enegía

Este es el método de bajo consumo energético para reciclar los desechos plásticos

Investigadores Universidad de California en Santa Bárbara han desarrollado un método eficiente y de bajo consumo energético para reciclar los desechos plásticos de polietileno, un polímero que se encuentra en un tercio de todos los plásticos producidos, con un valor global de alrededor de 168.000 millones de euros, en moléculas valiosas que pueden reutilizarse.

Se trata de un  método catalítico de baja temperatura que recicla el polietileno en moléculas de alto valor que son las base de muchos productos químicos industriales y de consumo. Agregar valor a lo que de otro modo se convertiría en basura podría hacer que el reciclaje de desechos plásticos sea una actividad más beneficiosa para el medio ambiente.

La propiedad que hace que los plásticos sean tan útiles es también lo que los hace tan persistentes, explican los investigadores. Es su inercia química: generalmente no reaccionan a otros componentes de su entorno. Las tuberías de plástico no se oxidan ni se filtran en el suministro de agua, las botellas de plástico pueden almacenar productos químicos cáusticos y los revestimientos de plástico pueden resistir altas temperaturas.

Aunque se ha invertido mucho esfuerzo de investigación en aprender cómo reducir los plásticos a sus componentes básicos con fines de sostenibilidad, el coste de la energía ha asolado el campo durante mucho tiempo, dicen investigadores.

Nuevos métodos

Esa línea de pensamiento innovadora produjo un nuevo método catalítico en tándem que no solo crea moléculas de alto valor directamente a partir de plástico de polietileno de desecho, sino que lo hace de manera eficiente, a bajo costo y con un bajo requerimiento de energía.

La condición de reacción relativamente suave ayuda a descomponer los polímeros de una manera más selectiva en una mayoría de moléculas más grandes dentro de un rango de lubricante, explicaron los investigadores.

Este método representa una nueva dirección en el ciclo de vida de los plásticos, una en la que los polímeros de desecho podrían convertirse en materias primas valiosas en lugar de terminar en vertederos, o peor aún, en vías fluviales y otros hábitats sensibles.

No obstante, aún se deben realizar investigaciones para ver dónde y cómo esta tecnología sería más efectiva, pero es una estrategia que podría ayudar a mitigar la acumulación de desechos plásticos, recuperar su valor y quizás reducir nuestra dependencia del petróleo del que provienen los plásticos.